ATI también pide acelerar estudios de sedimentos
Polvo. Concesionaria insistió que sus operaciones han permitido elevar los estándares ambientales en la zona.
Antofagasta Terminal Internacional -ATI- reiteró su preocupación por la presencia de sedimentos con metales pesados en la capital regional y solicitó que los estudios que buscarán determinar su origen y efectos, sean realizados con la mayor celeridad.
Por medio de un comunicado, la empresa comentó el anuncio realizado por el intendente Valentín Volta en orden a que efectivamente será realizada una limpieza mediante sistemas de absorción del polvo depositado en los puntos más afectados, de acuerdo a lo establecido por el Instituto de Salud Pública.
Como fue informado ayer por este Diario, la idea gobierno es desarrollar este programa a más tardar en enero, abarcando un área de tres cuadras desde el puerto hacia el interior de la ciudad.
DISPONIBILIDAD
"Entendemos la inquietud de la comunidad. Por ello celebramos el anuncio de las autoridades para iniciar un estudio que determine el efecto y origen de estos sedimentos. Esta investigación es urgente para avanzar en soluciones. ATI está disponible para colaborar en este proceso, tal como lo ha hecho desde que inició su concesión en 2003", citó la compañía.
El tema tomó fuerza hace diez días, cuando el ISP mostró los resultados de su análisis, dando cuenta que 27 puntos sondeados presentaban alta presencia de metales, como concentrado de cobre, plomo y zinc. En mayor detalle, los mayores valores se encontraron en las inmediaciones del terminal marítimo.
Ayer, el Colegio Médico alabó la decisión de Volta, apuntando que el foco de contaminación "de la ciudad, proviene efectivamente del terminal portuario local".
Debe precisarse que el gobierno comentó los resultados recién el viernes, después que Volta afinara una propuesta con La Moneda. El caso es analizado, entre otros altos personeros, por el ministro y el subsecretario de Interior, Rodrigo Peñailillo y Mahmud Aleuy, respectivamente.
Frente al punto, ATI insistió que desde marzo de 2003, cuando inició su concesión, "ha trabajado por elevar los estándares portuarios, protegiendo así a la comunidad y al medio ambiente y mejorando la calidad de vida de la ciudad".
Entre otras acciones citó que terminaron con el acopio de concentrado de cobre al aire libre, utilizando bodegas con presión negativa que permiten controlar tanto las emisiones a la atmósfera como los sedimentos.