La directora del Servicio Secreto estadounidense, Julia Pierson, renunció ayer tras una serie de incidentes registrados en septiembre, cuando un intruso violó la seguridad de la Casa Blanca y un hombre armado viajó en ascensor con el Presidente Barack Obama durante una visita a Atlanta.
El secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson, quien controla la agencia, dijo que aceptó la renuncia de Pierson.
El agente retirado Joseph Clancy fue nombrado director interino del Servicio Secreto, que protege al Presidente, a otros altos funcionarios y mandatarios visitantes, así como también investiga crímenes financieros.
Durante la visita de Obama el 16 de septiembre a una oficina del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) en Atlanta, el hombre, un guardia de seguridad privado con antecedentes penales, subió con él al ascensor y sólo llamó la atención cuando empezó a sacar de forma "bastante poco profesional" una serie de fotos del Presidente con su celular.
Cuando el Servicio Secreto se quejó al jefe directo del guardia sobre su comportamiento, se llevaron la siguiente sorpresa desagradable. El hombre fue despedido "de inmediato", y en ese momento sacó su arma de servicio y se la entregó al superior, ante lo cual los agentes se mostraron "sorprendidos" porque no se habían dado cuenta de que llevaba una, según denunció The Washington Post.