Celebraremos 204 años de historia independiente este '18', somos un país joven no sólo por sus pocos años de historia en comparación a los países de Europa, sino porque además la mayoría de nuestra población se concentra en un rango inferior a los 30 años.
Vivimos y crecimos desde nuestros primeros días dando arduas batallas que en otra época eran con armas precarias y que luego dieron paso a la pólvora y los cañones, hoy nuestra contiendas son contra la desigualdad, la pobreza y la falta de oportunidades, y nuestras armas son la voluntad, el conocimiento y las experiencias que hemos vivido como país, buenas y malas. Chile no puede seguir esperando por una educación pública de calidad y gratuita. No puede seguir esperando por una salud digna. No puede seguir esperando por un hogar, por un barrio, por una vida de familia.
Para ayudar en esta empresa hemos elegido a Michelle Bachelet como Presidenta para que encabece los cuatro grandes ejes que nos movilizan como Gobierno: Reforma educacional, nueva Constitución, reforma laboral y financiamiento a través de una reforma tributaria. La reforma educacional es una necesidad drásticamente urgente.
Por nuestra parte al asumir en marzo, hemos encontrado en la región una ejecución presupuestaria del 0.3 por ciento del presupuesto. En este contexto, nos hemos esforzado en apurar la ejecución total los FNDR para nuestra región, para el período 2014, superamos hasta hoy el 61% del total del presupuesto, destacando las inversiones en salud, vivienda y en seguridad. Hemos invertido en nuestra región durante el 2014 una cifra superior a los $ 48 mil millones.
Nuestro Gobierno Regional ha creado el Plan Regional de Gobierno, donde detectamos las áreas más urgentes que la región está requiriendo como una respuesta urgente y necesaria al desafío de mejorar, de crecer, de construir un mejor futuro.
Los valores que debemos rescatar durante las Fiestas Patrias son los ideales y principios que configuraron el anhelo de independencia- estos continúan hoy vigentes, y tienen plena actualidad. Se trata de las reglas del juego fundamentales de la convivencia colectiva, y habrá avenencia en esa concordia en la medida en que esas reglas cardinales interpreten el sentimiento y la voluntad y las ideas de toda la población del país.