Secciones

Niñas rompen historia de 87 años en Sokol

basquetbol. A poco de irrumpir, la rama femenina de Club del Halcón marcha como puntera e invicta en el torneo local.

E-mail Compartir

Dicen que los croatas son tranquilos y amables, pero que cuando se mezclaron con chilenos, una vez que a comienzos del siglo pasado se asentaron en Antofagasta, su carácter se hizo fuerte, emprendedor y vencedor.

Pensamos que esto no se puede negar, según vemos en la ciudad, con muchos descendientes que han tenido éxito empresarialmente, incluso a nivel educacional y del espec-táculo. Apellidos balcánicos hay por doquier en el país.

La mixtura chileno-croata forjó una nueva raza, sin que ninguno de los lados perdiera su identidad. Más, entre los dos plasmaron un connacional que ama lo suyo y lucha por eso.

La sangre croata tira a quienes tienen su origen en esa hermosa nación. Prueba de ello es que habitualmente viajan para conocer la tierra y gustos de sus ancestros y, por supuesto, su historia.

Sin embargo, siempre vuelven al terruño que los vio nacer, Chile, porque para los chileno-croatas su génesis está aquí, donde sus tatarabuelos sufrieron la lejanía de la tierra amada pero supieron salir adelante y formaron sus hogares en lo que a partir de entonces pasó a ser su terruño.

En los primeros tiempos esta parte del mundo fue su segunda patria, pero con el correr de los años se convirtió en la primera, de la que nunca más se fueron.

En 1927, ya con cientos de croatas y descendientes chilenos, muchos de ellos se agruparon y el primero de diciembre formaron el club que hoy identifica a la ciudad, y viceversa.

Al comienzo hubo más de una disciplina pero, con el correr de los meses convergieron en el basquetbol masculino, juego que, a la larga, los caracterizó en el Siglo XX, con éxitos rimbombantes a nivel zona norte y con extensión al país.

Ese aspecto llevó a los sokolinos a solicitar ayuda a la madre patria, en los años 50, para construir un recinto que les permitiera converger, recrearse y competir.

La entonces Yugoslavia de Tito les mandó tanto y tan buen cemento balcánico que ni los terremotos que nos han azotado en el tiempo han abierta siquiera una grieta en lo que es su orgullo: el Estadio Sokol de calle Esmeralda, con un aforo de 7 mil personas, aproximadamente.

Mas, el tiempo pasa y las revoluciones nunca terminan. Y el Club Croata Sokol no está exento de sufrir una. De hecho, ya la vivió el verano pasado.

Sí, 87 años después de emerger como la institución que hoy enorgullece a Antofagasta, un grupo de 23 niñas decidió armar un equipo y se incorporó a las Asociación de Basquetbol (ABA) local.

Así nació la rama femenina del baloncesto sokolino, que tuvo su partida con su primer entrenamiento el 4 de febrero de 2014, o sea este año, al mando del entrenador Mario Vuscovic Bezmalinoic.

La directiva, que presiden Ambrosio Restovic e Iván Korlaet, no sólo aplaudieron la decisión, también la apoyan y respaldan 100 por ciento desde entonces.

El plantel de jugadoras, cuya edad oscila entre 8 y 11 años, ya es parte de la competencia de la ABA con nueve fechas jugadas sin conocer la derrota.

Punteras e invictas, en absoluto quieren soltar esa privilegiada posición, la que ostentan a punta de dedicación y esfuerzo, además de la siempre motivadora compañía de sus padres y hermanos.

'Queremos ser campeonas al tiro', nos dijeron en uno de sus entrenamientos, cuando comenzaron a hacer noticia por lo bien que juegan y por la estadística que manejan a su favor y para el club de la franja.

Inolvidable fue para las 23 'halconcitas' su debut el sábado 17 de mayo, cuando ganaron 64-8 a Las Rocas.

Tonka Buzolic (4 puntos), Monserrat Medel (16), Camila Fuentes (22), Javiera Jara (7), Zvonka Caceres (8.)

Sebastiana Ormeño (3), Monserrat Perez, Anke Wagner, Isidora Cerezo, Angela Muñoz (2), Ibiza Rojas (2).

DT: Mario Vuscovic.