Recuerdo que a los doce años de edad fue que conocí el metro de Santiago. Quedé maravillado. Maravillado no solo por la modernidad del tren y las estaciones, en especial la 'Universidad de Chile' (que se me hacía una especie de base espacial de la serie de TV de esa época 'La fuga de Logan'), sino por su inteligente diseño urbano: eso de ir la Línea 1 por debajo de la principal avenida y columna vertebral de Santiago, la Alameda, con sus estaciones ubicadas en puntos estratégicos y con los nombres de ellos, y la Línea 2 perpendicularmente por la carretera norte-sur (en esa época eran solo dos líneas) me pareció muy lógico.

Y con la lúdica fantasía de un niño de doce años, de vuelta en Antofagasta comencé a imaginar un metro en la ciudad, y de inmediato asocié la Universidad de Chile de la ciudad (hoy Universidad de Antofagasta) ubicada en el extremo sur, como el lugar de una estación también con ese nombre.

Como la universidad era lo más importante al sur, sería el punto de inicio-término del recorrido de un tren subterráneo entre ella y el centro de la ciudad, y recuerdo que lo ideé rápidamente debido a que conocía bien la zona sur porque era en donde vivía y me movía mayormente.

Fui entonces ideando el recorrido desde la universidad hacia el centro, y éste era, nombrando las estaciones y actualizando 'mi idea' a la actual ciudad: 'Universidad de Antofagasta' - 'Carrizo' - 'Huanchaca' - 'Universidad Católica del Norte' - 'Parque Japonés' - 'Antonino Toro' - 'Alcalde Maximiliano Poblete' - 'Plaza Sotomayor' - 'Plaza Colón'. Como verán, imaginé el tren partiendo de la casa de estudios no transitando por la costanera, sino que internándose a la ciudad en diagonal para empalmar con el eje Av. Angamos - Av. Brasil - Matta.

Hoy hay un proyecto de tranvía para Antofagasta, y por lo que he podido saber, una de las líneas ideadas para la zona sur no difiere mucho de lo imaginado por mí hace más de 30 años.

En la segunda parte de esta entrega continuaré refiriéndome al tema.

Linterna