El buen clima de Antofagasta es ideal para optar a movilizarse en moto, además de su bajo consumo de combustible, aunque los hoyos en las calles y los perros vagos son factores en contra.
Para quienes comienzan el uso de este vehículo, lo ideal es un modelo de 125 centímetros cúbicos, con un motor que permite recorrer cerca de 50 kilómetros con sólo un litro de combustible, y cuyo valor llega al millón de pesos.
Sergio Cordero -de Cordero Motos- precisó que desde hace unos dos años 'se ha notado un fuerte aumento en el número de antofagastinos que deciden subirse a una moto para movilizarse por la ciudad. Muchos de los nuevos motociclistas son personas adultas que optan por dejar el auto en la casa y moverse en un vehículo mucho más cómodo y económico', dijo.
Ahora si buscan una moto más poderosa están los modelos de 250 centímetros cúbicos, que tiene un costo de 3 millones 100 mil pesos, capaz de correr hasta los 180 kilómetros por hora.
instructor
El suboficial mayor de Carabineros, Julio Alister, se subió a una moto en 1989 cuando hizo el curso de motorista en Santiago y desde entonces ha cumplido esas funciones. Durante toda su jornada de trabajo recorre las principales calles de la ciudad.
En la actualidad es el instructor de los motoristas en Antofagasta y conduce una vistosa moto BMW de 900 centímetros cúbicos, del año 2008, capaz de superar los 240 kilómetros por hora. Aseguró que hasta la fecha nunca ha tenido un accidente grave, pero que si algunas caídas, como cualquier motorista, según comentó.
Dentro de la institución acaba de terminar dos cursos, uno de ellos para las motos 'todo terreno', que se denominan 'tango tango'. Junto a ello preparó a unos 40 efectivos para conducir motos de tránsito, lo que permitió la llegada de nuevos vehículos este año en la capital regional.
'Los principales problemas que enfrenta uno en una moto en Antofagasta son los hoyos que están en las calles, que en algunos casos son verdaderos cráteres. También los perros que en jaurías se acercan y nos complican la vida', comentó.
Según Alister ya se han registrado ataques de perros abandonados a motoristas de Carabineros mientras cumplen con sus servicios.
El suboficial aseguró que siempre se respetan los límites de velocidad, pero la versatilidad de estos vehículos permite una mayor rapidez para poder sortear congestiones vehiculares y otros obstáculos, para así cumplir con la labor policial.
Patricio Flores lleva 10 años trabajando como repartidor en la empresa Pizza Pizza. 'Yo manejo una moto de 125 centímetros cúbicos y con ella llego a todas partes sin problemas', relató.
En su vehículo ha aprendido a sortear los problemas con los que se encuentra en la calle como los hoyos y perros. 'Uno se acostumbra a los obstáculos y sabe que debe manejar la moto con mucho cuidado y de forma responsable. Creo que eso es lo fundamental', precisó el trabajador.
Cada vez que le toca hacer un reparto en moto, se coloca cuidadosamente todos los implementos de seguridad y trata de hacer el recorrido para llegar con el pedido lo antes posible a los clientes.
scooter
El empresario Luis Pizarro hace cinco años, que optó por dejar el auto en la casa y empezar a ir a su trabajo en moto. Hoy tiene una scooter de 125 centímetros cúbicos y confesó que que aprendió a no transitar por las calles más congestionadas y así andar de forma más segura en su vehículo.
'Al principio mis compañeros de trabajo me hacían burlas, pero después de eso se acostumbraron y hoy ya no es tema el hecho de que me mueva en moto', sentenció.