Aniversario de Proa
Carlos Tarragó
Hace 22 años nació la Corporación Pro Antofagasta (Proa), una institución privada sin fines de lucro orientada a promover y ejecutar obras e iniciativas de amplio beneficio comunitario. En su seno se congregan personas que sienten la necesidad de devolverle la mano a una ciudad que los ha acogido desde su nacimiento o llegada a ella.
También bajo su alero conviven diversas empresas que hacen realidad su responsabilidad social con la comunidad. Por su composición, hasta lo que sabemos, no existiría otra organización similar en el país. Su ámbito de acción se enmarca en el turismo, la cultura y las artes, el desarrollo comunitario y la identidad y patrimonio.
Desde Proa hemos demostramos la responsabilidad que un ciudadano debe tener con su comunidad y que es más legítima y constructiva cuando ésta se ejerce a través de una participación activa en vez de quedarse en la crítica fácil, permanente y sin ninguna contribución.
Nuestra indeleble impronta se puede apreciar en numerosos rincones de la ciudad. Los tres gigantescos murales del talentoso Luis Núñez, nos recuerdan nuestra aventurada historia y esforzado pasado. En el mismo sentido apuntan los siete libros editados, mientras que la otrora y desprovista de atractivo Plaza Colón, hoy luce pulcra y galana gracias a nuestra intervención. Las Ruinas de Huanchaca, cuya base de su rescate se inició con el diseño ganador del Concurso de Ante Proyecto de Arquitectura, que promovimos junto la Universidad Católica del Norte, se encaminan a constituirse en un gran polo patrimonial y cultural.
Y en medio del desierto surge una monumental mano, la escultura de Mario Irarrazábal, que saluda o despide a los viajeros. Aparte de muchísimos otros aportes, uno de nuestros mayores desafíos, desde hace 10 años, es intentar recuperar aquel lejano rótulo de 'La Perla del Norte', que con orgullo exhibía Antofagasta por su limpieza.
Estamos convencidos que a través de la educación provocaremos el cambio cultural que nuestros niños requieren, para ser ciudadanos respetuosos y celadores del medio ambiente. A la fecha cerca de 170.000 niños, entre 3 y 10 años, han escuchado nuestras charlas enfocadas a inculcarles el vivir en un entorno limpio.
Con todo este accionar hacemos realidad la misión de Proa: comprometidos por una ciudad mejor.