A 600 aumentaron los mineros que no pueden subir a faenas
nueva ley. Dirección del Trabajo tardaría un mes en pronunciarse sobre la medida, mientras el sindicato de Escondida evalúa ir a la OIT si no hay solución.
A 600 aumentó el número de trabajadores del sector minero que no puede subir a las operaciones ubicadas a más de 3.000 metros de altura en la región en sólo un mes.
Incluso desde el Sindicato N°1 de Minera Escondida evalúan acudir a la Organización Internacional del Trabajo (OIT), si es que el tema no tiene una solución luego de las conversaciones que sostendrán en los próximos 30 días con los organismos públicos.
El problema generado tras la puesta en marcha de la nueva normativa (D.S. 28), que rige desde el 8 de noviembre de 2013 y que fijó un completo chequeo médico para las personas que desempeñan trabajos entre tres mil y 5.500 metros sobre el nivel del mar, mantiene la tensión entre los principales sindicatos involucrados que aseguran que el número trabajadores afectados podría seguir aumentando.
Buscando revertir la situación la Federación Minera, que agrupa a 20 organizaciones de la grandes compañías extractivas, y el sindicato Nº1 de Minera Escondida, sostuvieron reuniones en Santiago exigiendo un pronunciamiento de la Dirección del Trabajo en torno a la aplicación de la medida.
respuesta
En ese contexto el director nacional del Trabajo, Christian Melis, se reunió ayer con las organizaciones sindicales buscando dar una señal en torno al trabajo que están realizando para darle solución al problema.
'Recibimos la petición de los trabajadores y estamos en la etapa de preparación de un pronunciamiento jurídico. También conformamos una mesa de trabajo junto a la Subsecretaría de Previsión Social para revisar cuáles son las problemáticas que ha generado la aplicación del decreto', dijo.
Melis agregó que la Dirección del Trabajo tiene registros de trabajadores que han sido enviados con licencias médicas o con vacaciones, porque eventualmente las empresas no tienen donde reincorporarlos si no pueden subir a la faena.
El directivo también precisó que en un mes el organismo estaría en condiciones de emitir el pronunciamiento que exigieron los trabajadores.
Dirigentes
En la actualidad la nueva normativa que rige los trabajos en altura involucra a cerca de 16 mineras que operan sobre los 3.000 metros sobre el nivel del mar y cada una emplea en promedio a 2.500 trabajadores. De ellas, por lo menos, cinco faenas están ubicadas en la región.
Ante ello, el vocero del Sindicato N°1 de Minera Escondida, Roberto Arriagada, recalcó que es relevante que las autoridades tomen el problema con seriedad y asuman la representatividad de los trabajadores para construir una normativa que sea de beneficio efectivo para la toda la fuerza laboral.
Arriagada dijo que existe un compromiso con las autoridades para buscar una solución en conjunto, y en ese contexto el dirigente subrayó que si el pronunciamiento no es el esperado, existe la opción de recurrir a la Organización Mundial del Trabajo (OIT) y solicitar un juicio u otra acción contra el Estado chileno, porque en palabras de Arriada, no están asegurando la salud, vida e integridad de quienes desempeñan labores en altura geográfica.
'A la fecha tenemos cerca de 600 trabajadores que están fuera de las faenas sólo en Minera Escondida, algunos con licencias médicas otros con vacaciones', dijo.
El nuevo reglamento que rige los trabajos en altura establece una serie de medidas para asegurar la salud del personal en las faenas como mejoras en la infraestructura, pero también hay exigencias físicas para el personal.
En lo concreto, cada trabajador debe pasar 12 exámenes médicos y si presenta alguna contraindicación normada en la nueva ley, según un listado de 33 patologías, simplemente no puede subir a las operaciones por los riesgos que podría presentar al desempeñar labores en condiciones geográficas de mayor exigencia (ver infografía).
La dificultad, afirman los sindicatos, es que la ley dice que los trabajadores que no pueden subir a las operaciones deben ser reincorporados a otras labores, pero como el desarrollo de la industria minera por esencia es sólo en las faenas, el personal afectado no tiene donde reubicarse.