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Nuevo revés presenta designación del Tribunal Ambiental en Antofagasta

atraso. Corte Suprema tendría congelado el proceso por falta de candidatos en la región.

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Aunque la Corte Suprema aún no confirma oficialmente que el proceso de selección de candidatos para constituir el Tribunal Ambiental de Antofagasta estaría nuevamente quedando desierto, fuentes cercanas al Poder Judicial afirman que los profesionales escogidos a través de Alta Dirección Pública (ADP) no están cumpliendo con los requisitos que exige la institución.

En junio de 2013 el organismo debía entrar en operación, pero las altas exigencias que requieren los cargos provocaron postergaciones en la designación de los ministros que integrarán la institución.

De hecho, de los tres tribunales ambientales creados por la ley 20.600, el primero en funcionar fue el de Santiago en marzo del año pasado, después partió el de Valdivia y sólo Antofagasta está presentando problemas.

Y es que la Corte Suprema dos veces rechazó la nómina de candidatos. En abril fue presentada la última lista de postulantes, pero todo indica que el máximo tribunal del país sigue considerando que los designados en primera instancia no poseen el currículum suficiente para ocupar los cargos.

Los Tribunales Ambientales son órganos jurisdiccionales especiales, sujetos a la superintendencia directiva, correccional y económica de la Corte Suprema, y su función es resolver las controversias medio ambientales de su competencia.

Dicho rol en Antofagasta cobra mayor relevancia por la gran actividad industrial que se desarrolla en la región.

Hay que considerar que este tribunal tendrá competencia en Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta, Atacama y Coquimbo. De ahí la importancia.

Postulantes

La información proporcionada por el Servicio Civil (Alta Dirección Pública) aclara que luego de un tercer concurso para seleccionar los dos cargos de abogado titular y una vacante para ministro abogado suplente del Tribunal Ambiental de Antofagasta, el consejo de ADP conformó las respectivas nóminas de candidatos.

Lo anterior debió realizarse luego que en septiembre del año pasado la Corte Suprema rechazara algunos nombres de abogados propuestos, lo que implicó realizar una convocatoria adicional.

Según el Servicio Civil, el proceso de selección de los ministros de este tribunal ha sido el más complejo de los tres que estableció la ley, en especial por el competitivo y acotado mercado laboral de la zona norte.

A ello se suma que el sistema de nombramientos de estos tribunales especializados es uno de los más complejos del sistema estatal.

mecanismo

De hecho, para asegurar imparcialidad, independencia y calidad técnica la ley fijó una serie de inhabilidades y restricciones a los ministros y un mecanismo para el nombramiento en que participa el consejo de Alta Dirección Pública, la Corte Suprema, el Presidente de la República y el Senado.

En efecto, la Corte Suprema, tras recibir a los postulantes en audiencia, debería elaborar una quina en cada cargo para ser enviada a la Presidenta, la que finalmente debe proponer un nombre al Senado para su ratificación, proceso que estaría congelado aún en el máximo tribunal.

Además a las complejidades para llenar los cargos también se suman las diferencias que tiene la Corte Suprema con los tribunales ambientales. Desde un principio los ministros sostenían que el nuevo organismo no cumplía con los requisitos mínimos para ser nombrado como tribunal e incluso se hicieron cuestionamientos públicos a su denominación y también a los sueldos de sus integrantes.

La ley establece que un ministro titular de dicho organismo tendrá una renta bruta mensual de alrededor de $6,5 millones y un ministro suplente $3.2 millones.

perfiles

Para elaborar el perfil de los cargos de ministros, el consejo de Alta Dirección Pública sostuvo reuniones con el presidente de la Corte Suprema, junto con enviarle al máximo tribunal del país una propuesta de perfil para sus observaciones.

Entre los atributos que contempla el perfil destacan especialmente factores como la probidad de acuerdo a parámetros éticos intachables e independencia de presiones que afecten la imparcialidad de sus decisiones.

También se contemplan otros atributos, como visión estratégica; criterio e independencia en la toma de decisiones; gestión y logros; comunicación efectiva; manejo de crisis y contingencias; liderazgo y trabajo en equipo; innovación y flexibilidad y conocimientos técnicos, entre otros.