En la actualidad la nueva normativa que rige los trabajos en altura involucra a cerca de 16 mineras que operan sobre los 3.000 metros sobre el nivel del mar y cada una emplea en promedio a 2.500 trabajadores. De ellas, por lo menos, cinco faenas están ubicadas en la región.

De ahí que la puesta en marcha de la nueva ley, que según los principales sindicatos mineros no fue bien planificada, ya tiene a más de 300 trabajadores imposibilitados de subir a las operaciones por no cumplir con las exigencias de salud necesarias para desempeñar funciones geográficamente más exigentes, entre ellas el sobrepeso.

Y es que desde principios de noviembre comenzó a regir la modificación al Decreto 594 del Ministerio de Salud, de 1999, sobre condiciones sanitarias y ambientales básicas en los lugares de trabajo, cambio que estableció medidas de prevención y protección de la salud, para las personas que laboran expuestos a Hipobaria Intermitente Crónica (ver recuadro).

Aunque fueron los propios trabajadores quienes impulsaron la medida, en la actualidad son ellos los que también la han criticado por la forma en que la nueva ley está siendo aplicada en las empresas.

efectos

A juicio del director de la Federación Minera de Chile, Agustín Latorre, es urgente que se especifique la forma de aplicación de la medida, porque a la fecha no existe claridad sobre sus reales alcances y las empresas al cumplir la ley están 'congelando' a algunos trabajadores, número que en palabras de Latorre podría aumentar en las próximas semanas.

'Nosotros al final del gobierno anterior de la Presidenta Michelle Bachelet discutimos que esta iniciativa sería preventiva para que los trabajadores no se enfermaran, pero finalmente la ley establece medidas reparatorias, o sea cuando las personas ya están enfermas y además tiene vacíos importantes', argumentó el dirigente de la multisindical.

Latorre recalcó que en la actualidad no hay certeza sobre qué pasará con las personas que tienen enfermedades adquiridas por trabajar en la altura y ahora están impedidos de subir a las operaciones.

'La norma no se hace cargo de este problema y las empresas están aprovechando este vacío para dejar fuera a gente de mayor de edad o a los que tienen problemas de salud', dijo.

Agustín Latorre también recalcó que la situación podría agudizarse si las desvinculaciones se hacen efectivas, por eso es importante que las conversaciones a nivel nacional con la Dirección del Trabajo arrojen algunos resultados, pero sobre todo soluciones.

bonos

Según datos de la Mutual de Seguridad cerca del 50% de los trabajadores de la industria minera en la región presenta algún grado de sobrepeso, una de las principales condiciones para contraer alguna enfermedad relacionada a la ausencia de oxígeno, entre otras cosas.

El problema según el presidente del sindicato de Barrick Zaldívar, Raúl Torres, es que los mineros afectados por la aplicación de la norma de salud ocupacional, al no poder subir a faenas, pierden una serie de beneficios económicos, como los bonos relacionados a la producción, situación que está afectando a los trabajadores y que al mismo tiempo los deja con incertidumbre sobre su condición laboral a futuro.

En tanto que el presidente del sindicato de Minera El Abra, David Venegas, argumentó que la compañía a la fecha ya tiene 50 empleados fuera de las faenas y recién sólo un tercio de los trabajadores está al día con sus exámenes de salud, además habría que considerar la situación de los contratistas.

'El problema no es menor, porque no sólo está afectando al personal, sino que también tendrá un impacto en la productividad de la empresa', sostuvo Venegas.

gestiones

Para el vocero del sindicato 1 de Minera Escondida, Roberto Arriagada, la ley tal como está en la actualidad, puede aplicarse bajo varias interpretaciones, por eso el dirigente manifestó que necesariamente debe cambiarse.

'Lo más delicado es la reubicación de los trabajadores que no pueden subir a las operaciones, además de las remuneraciones, porque en la práctica esa condición no está siendo respetada', dijo el vocero.

Arriagada también agregó que en julio el sindicato tiene agendada una reunión con el subsecretario de Previsión Social para pedir formalmente una nueva legislación de trabajos en altura, lo que estaría coordinado con la senadora Isabel Allende y el director nacional del Trabajo.

La idea, dijo Arriagada, es revisar las problemáticas de las faenas afectadas para materializar una nueva norma que se haga cargo de la realidad que tienen las personas expuestas a condiciones de trabajo más exigentes.