En su visita a Buenos Aires, la Presidenta Michelle Bachelet declaró a Argentina socio estratégico. En este diseño debemos unir al Norte Grande de Chile con el Noroeste Argentino (NOA), proyecto que forma parte del corredor 'Trópico de Capricornio', que busca sumar al sur del Perú, Bolivia, Paraguay y el suroeste de Brasil. La apuesta apunta a los mercados del Asia-Pacífico.
Hay avances. El paso de Jama es una realidad. Une Antofagasta, Jujuy, Salta y queda en línea con las carreteras del norte chileno y argentino. Falta mejorar el paso de Sico y culminar la interconexión de las empresas Ferronor y Belgrano Carga, que antes de fines de año debería dar acceso a nuestros puertos a los proyectos mineros del NOA.
Los cluster de la minería chilena están disponibles para apoyar los emprendimientos mineros de la sub-región. Servicios financieros, portuarios, de ingeniería y geología, la generación y transporte de insumos y equipos, la formación de cuadros técnicos y profesionales en nuestros institutos y universidades, forman el gran abanico de soportes a disposición de nuestros vecinos. Ahora estamos en los inicios del ambicioso proyecto de generación de un cluster de energía solar de clase mundial en la Región de Antofagasta. También aquí tenemos amplias posibilidades de cooperación.
Sigue en deuda el flujo y ritmo de atención en los pasos fronterizos y un acuerdo razonable en materia fito-sanitaria. Consumimos fruta producidas en el NOA, que ingresa por Mendoza a Santiago y viaja otros miles de kilómetros para llegar al norte chileno. Anhelamos consumir los productos de la poderosa y diversificada agro-industria del NOA y los vecinos del Trópico de Capricornio. Los puertos chilenos, con algunas inversiones mediante, también pueden ser habilitados para generar cadenas de frío, almacenaje y embarque necesarios para sacar a los grandes mercados del Pacífico.
Han pasado décadas de esfuerzos integracionistas. Han jugado en contra el centralismo y la crónica concentración del poder de la metrópoli capitalina. Tenemos capacidad crítica, hemos avanzado en infraestructura, somos una región altamente productiva. Llegó la hora de iniciar un desarrollo sustentable desde la región, pero necesitamos consolidar una alianza entre los gobiernos locales, provinciales y regionales, los sindicatos, asociaciones de empresarios, académicos, medios de comunicación y la comunidad plena.