La muerte de una funcionaria de 48 años en el Hospital Regional, el viernes pasado, provocó fuertes reacciones entre sus compañeros de servicio.

Los paramédicos del recinto de salud comenzarán hoy una jornada de reflexión junto a la presidenta de la Federación Nacional de Asociaciones de Funcionarios Técnicos de los Servicios de Salud (Fentess), Silvia Aguilar, para evaluar sus condiciones de trabajo y una posible paralización a partir de mañana.

La agrupación también exigió la presencia de la ministra de Salud, Helia Molina, a fin de aclarar la muerte de su colega y buscar soluciones a los problemas que enfrentan. Desde el Servicio de Salud informaron, sin embargo, que la secretaria de Estado no tiene contemplada visitas a la región.

PARAMÉDICO

Jéssica López Morales, trabajó alrededor de 20 años como paramédico de la Unidad Oncológica del recinto médico y falleció en ese mismo lugar a raíz de un paro cardiorrespiratorio.

Luego del deceso, la presidenta de la Fentess de Antofagasta, Fabiola Allende, contó que tras sentirse mal, la profesional fue evaluada por un neurólogo del mismo hospital y se le tomó un escáner, el cual no habría arrojado complicaciones, por lo que se le dio el alta.

'La paramédico volvió a su trabajo y sufrió un desmayo en el puente del hospital. Unos médicos que iban pasando la atendieron y la llevaron de nuevo a Urgencias. Ya presentaba problemas. Luego cayó en un paro cardiorrespiratorio y se constató su fallecimiento a las 14.15 horas', indicó la dirigente el día del hecho.

Durante la misma jornada, más de cien funcionarios del hospital protestaron a las afueras del hospital para dar a conocer su molestia por las condiciones de trabajo en que deben desempeñarse.

Además acusaron que no se activaron los protocolos de rigor, pese a que se estaba en presencia de una 'alerta azul', correspondiente a emergencias intrahospitalarias.

hospital

Por su parte, el Hospital Regional, a través de un comunicado, lamentó lo ocurrido y dio cuenta de los esfuerzos desplegados para tratar de salvar la vida de la funcionaria. Según el informe del centro de salud, Jéssica Morales tuvo dos episodios complejos que obligaron a activar la alerta azul.

'Mientras era evaluada, presentó un paro cardiorrespiratorio, debiendo realizarle las maniobras correspondientes de reanimación por más de 25 minutos, en donde logró salir de él, pero lamentablemente momentos después volvió a entrar en paro, no pudiendo resistir su cuerpo', informaron.

La necropsia practicada a la funcionaria determinó que la muerte se debió a una trombosis pulmonar bilateral masiva, cuadro que presenta una mortalidad del 90%.

Dicha información fue entregada por la directora (s) del hospital, Juana Pérez, a los familiares, quienes, según la versión del hospital, habrían entendido la situación.