Brechas salariales y privación relativa
Pablo Neudörfer Retamal
Las diferencias de sueldo entre los trabajadores son un fenómeno evidente y algunos dirán que natural en el mercado laboral. Sin embargo, es interesante conocer qué explica que algunas personas ganen más que otras, aun realizando labores similares. Este fenómeno se conoce en la literatura especializada como brechas salariales.
Existen diversas dimensiones en las que se puede analizar este fenómeno. Las más conocidas son la diferencia salarial entre géneros, entre trabajadores calificados y no calificados, entre trabajadores de industrias exportadoras versus no exportadoras y entre trabajadores sindicalizados y no sindicalizados.
Lo que se observa es que los hombres ganan más que las mujeres, lo mismo ocurre con las personas con mayor nivel de educación, con aquellos que están sindicalizados y probablemente con trabajadores que pertenecen a industrias abiertas al comercio exterior.
Desde el punto de vista social y económico es importante entender el motivo por el cual existen brechas salariales y determinar si se pueden eliminar o, por lo menos, minimizar.
La apertura al comercio exterior que ha tenido Chile estos últimos años ha generado una mayor importación de capital físico y con ello mayor demanda por trabajadores calificados, lo que finalmente redunda en una mayor brecha salarial. Antes de la apertura comercial, teníamos menores ingresos pero la mayor parte de los trabajos eran no calificados y con una brecha salarial menor.
La evidencia muestra una relativamente baja brecha salarial antes de la dictadura, grandes brechas en el periodo de apertura comercial y una estabilización tras el retorno a la democracia.
Es interesante vincular este tema con el descontento de la sociedad respecto a la desigualdad de oportunidades. Un viejo concepto aparece como natural en este punto: 'Privación relativa'. Si una persona no goza de algo y sabe que alguien que estima que es su par sí goza de aquello, entonces encontrará que la situación es injusta.
Eso es privación relativa y está presenta aunque el individuo haya mejorado su situación con respecto a la de sus padres. Este fenómeno subjetivo, pero muy real, atenta contra el buen vivir sembrando descontento y desconfianza entre los integrantes de un grupo social.