Sin ninguna consideración por los 35 niños que son atendidos en el centro infantil de la corporación 'Laureles', la noche del viernes delincuentes sustrajeron los alimentos y las carteras de las cuatro funcionarias que estaban dedicadas al cuidado de los menores.

El recinto que se ubica en avenida Pedro Aguirre Cerda esquina Ascotán (sala cuna y jardín infantil Laurelitos), fue construido para hacer muy difícil el acceso a gente externa, sin embargo, los antisociales se las arreglaron para ingresar y sustraer especies. Precisamente al lado del jardín, que alberga a niños en situación vulnerable, hay un sitio eriazo donde se han depositado escombros y desechos de algunas construcciones, lo que permitió que los delincuentes pudieran acceder a uno de los muros del recinto.

Una vez que tuvieron acceso fácil, ingresaron a las dependencias y sustrajeron los alimentos destinados para la atención de los lactantes y niños de la corporación. Se apoderaron de toda clase de mercaderías, como pollo, leche y hasta las verduras que estaba dispuesta en la despensa.

Patricia González, presidenta de la corporación 'Laureles' lamentó la ocurrencia de este hecho, porque afecta a niños desvalidos que con mucho amor son atendidos en ese establecimiento. 'Tenemos 35 niños, los más pequeños tienen 12 y 18 días de nacidos y el más grande tiene 6 años. Los despojaron de la alimentación que estaba prevista para el fin de semana', precisó.

En el turno estaban al cuidado de las cuatro funcionarias, las mismas que perdieron sus documentos y dinero, luego que les sustrajeran sus carteras que dejaron en una dependencia del recinto.

La presidenta de la corporación dijo que en ese lugar se sienten un tanto abandonados, porque hay poca vigilancia policial. Además requieren una mejor iluminación y un semáforo. 'La gente que trabaja acá es de mucho esfuerzo, y en cosa de minutos perdieron sus pertenencias. No es posible que ocurran estas cosas', sostuvo preocupada.

Además hace poco tiempo se hizo una inversión que superó el millón y medio de pesos para pintar el lugar, sin embargo, rayaron con graffiti una muralla.

'Pedimos mayor presencia policial, ya que en este sector funcionan varios establecimientos, que se preocupan por el bienestar de niños y adolescentes', confidenció Patricia González.

Los lactantes y menores que llegan al establecimiento, son derivados hasta allí por el Sename. El sueño para la Corporación es que los niños sean felices y sanos.

Los niños y niñas cobijados por la corporación 'Laureles' reciben atención las 24 horas.

La idea de contar con una casa de acogida para lactantes, surgió luego que la esposa del exintendente, Jorge Molina, conociera numerosos casos de niños maltratados que en Antofagasta no tenían un lugar especializado para ser atendidos, y así con la ayuda de personas solidarias y algunas instituciones, hizo realidad este gran sueño.