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Titanic cultural

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Si tuviéramos que opinar sobre nuestra realidad cultural, esto es, sobre qué clase de cultura flota y se mueve entre nosotros hoy en día, podríamos distinguir, la existencia de dos realidades culturales opuestas.

No es necesario designarlas como la alta y la baja cultura sino más bien (y esta definición es completamente provisional) de la cultura que ahonda en los procesos más profundos del ser y aquella que existe como mero ornamento o diversión para las personas.

Ambas formas de cultura, me parece, se encuentran sintetizadas y ejemplificadas en unas cuantas escenas de la famosa película Titanic de James Cameron.

Pienso en el momento después que han chocado contra el iceberg, cuando se reúnen los ingenieros, el capitán y el dueño del barco y mirando los planos llegan a la aciaga conclusión que el Titanic se va a hundir irremediablemente.

Mientras miran los planos hay una comprensión del mundo y su desastre y pienso entonces en Dostoievski, Faulkner, Melville, Gaddis, Kafka. Por otra parte están los músicos que suben a cubierta para divertir a los pasajeros mientras abordan las lanchas salvavidas.

Se ponen ahí, en medio del caos, y hacen como si no estuviera pasando nada. Al final, cuando la debacle ya es incontestable, cuando el barco está todo inclinado y hay muerte y destrucción por donde uno mire, sólo ahí recién los músicos se detienen.

Pero no es para compartir el horror generalizado sino simplemente para quejarse que nadie los escucha. Luego, tras una despedida dudosa, deciden volver a tocar, inútilmente, hasta el fin, sabiendo que su arte no ayudó a nadie, pero al parecer los ayudó a sí mismos.

Deciden seguir con el arte en el vacío, el arte sin público y sin conciencia, emoción leve y agradable, pero sin ninguna trascendencia: la mayor parte del arte que se hace hoy en día a todos los niveles mientras las sociedades neoliberales se vuelven cada vez más metálicas e inhumanas y se hunden en los postulados del imperialismo científico.

Balance: Filzic 2014 se consolidó como un gran referente literario

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Proyectaron un crecimiento superior al 25% respecto del año anterior. Apostaron por una consolidación en el circuito internacional. Durante los 11 días de actividades más de 100 mil personas visitaron el recinto (20% más que en 2013). Por su aporte a la integración Latinoamérica fueron galardonados por la Asociación de Periodistas de Espectáculos de Chile (Apes). Por si fuera poco, fue designada como Secretaría Pro-Tempore en el Primer Encuentro de la Red Latinoamericana de Ferias del Libro Regionales.

En su IV versión la Feria Internacional del Libro Zicosur 2014 sólo cosechó éxitos que, sin duda, la posicionaron como el evento multicultural más importante del norte y en la segunda feria del libro más relevante del país, capaz de crear y mantener una propuesta sólida en sus cuatro años de vida, vinculando todas las expresiones artísticas en torno a la literatura, pero además, logrando una fuerte interacción con los principales referentes del mundo editorial de habla hispana.

"Claramente la evaluación es más que positiva. Lo más importante es que a través de Filzic Antofagasta empieza convertirse en un polo central de desarrollo en términos de difusión del pensamiento y de la nueva avanzada cultural latinoamericana. El escritor arequipeño Oswaldo Reynoso en su visita a la feria definió esta corriente como 'la rebelión de las regiones', que aboga por una independencia cultural", explicó el productor ejecutivo del encuentro literario, Patricio Maturana.

Además el músico antofagastino adelantó cuáles serían los aspectos a mejorar para las próximas versiones de Filzic, planteando una feria más amable desde el punto de vista práctico mejorando y ampliando las instalaciones.

"Nuestros desafíos futuros es que nuestro espacio sea lo más amistoso y amigable con quienes nos visitan y eso quiere decir tener mejoras sustantivas en materia de infraestructura. En ese sentido, la autocrítica es hacer un mejor uso del espacio con calles más expeditas, contar con mayores espacios de permanencia al interior de la feria donde la gente pueda encontrarse. La idea sería hacer un mini ciudadela", comentó.

En su anhelo por consolidar la feria en el circuito internacional, este año fueron siete los países que participaron del encuentro literario (Argentina, Perú, Bolivia, Colombia, Paraguay, México y Cuba) y con la presencia de grandes escritor de la talla de Leonardo Padura, de Oswaldo Reynoso de Perú, y de Gioconda Belli de Nicaragua.

"El aprendizaje en esta oportunidad es que cantidad no siempre es sinónimo de calidad. Probablemente tendremos que hacer una evaluación de la cantidad de gente que tenemos invitada y procurar restringir un poco ese tema a aspectos más de calidad, cosa de que el público tenga una oferta mucho más selectiva y dirigida para que efectivamente puedan disfrutar de los distintos escritores", aclaró Maturana.

Otro de los aspectos que destacó el productor ejecutivo de la feria en esta cuarta versión fue la incorporación de extensiones como Biblioteca Viva, Balmaceda Arte Joven, Biblioteca Regional, Fundación Ruinas de Huanchaca y las universidades Católica del Norte y Antofagasta.