Control cero alcohol
El exitoso plan regresa para continuar con sus objetivos de evitar que se mezcle el consumo de alcohol y la conducción, y reducir las fatalidades en el tránsito.
La puesta en marcha de este programa permitió reducir a niveles históricos los fallecimientos en accidentes en los que el consumo de alcohol estuvo involucrado.
El Gobierno puso nuevamente en marcha el programa Control Cero Alcohol, luego que durante Semana Santa las fatalidades en accidentes de tránsito prácticamente se duplicaran en el país respecto a las ocurridas en similar fecha del año pasado. La respuesta fue rápida, considerando además las recientes críticas debido a la presunta cancelación de esta iniciativa que lanzara la administración anterior. Al respecto, la Presidenta Michelle Bachelet argumentó que fueron sus predecesores quienes no dejaron los recursos necesarios para desarrollar la campaña en las fechas recientes.
Pero más allá de la polémica y sus alcances políticos, la reaparición de este programa significa un avance importante en la seguridad vial, especialmente considerando esta fecha en particular. El jueves feriado, dará la oportunidad a miles de automovilistas para que vuelvan a circular por las calles y carreteras, con los riesgos que aquello también trae cuando aparece asociado el consumo de alcohol.
El control Cero Alcohol se transformó en uno de los avances más importantes y efectivos en relación a sus objetivos. Según dio a conocer en enero el Ministerio de Transportes, las muertes en el tránsito en las que estuvo presente el consumo de alcohol se redujeron en un 28%, resultados que se atribuyen a la implementación de este plan.
De acuerdo a las cifras entregadas a principios de este año durante 2012 la cantidad de personas que fallecieron en estas circunstancias se elevó a las 148. Ése fue el año en que entró en vigencia la nueva ley relacionada con la tolerancia cero al alcohol en la conducción. Un año antes, en 2011, los fallecidos llegaron a 205 personas.
Es por eso que se reconoce en este plan una fórmula que ha dado resultados y hoy se celebra el que haya sido puesta nuevamente en marcha, sintonizando con otras iniciativas legislativas y ciudadanas que van en la misma dirección, como por ejemplo, el impulso de la Ley Emilia. Estos controles permiten de manera efectiva y por disuasión, evitar que muchos casos de conducción en estado de ebriedad y sus consecuencias puedan frenarse, antes que terminen en tragedias.