La Segunda Sala de la Corte Suprema ordenó en fallo unánime investigar eventuales delitos de incumplimientos de deberes militares, en la investigación del accidente del Casa 212 de la Fuerza Aérea de Chile que cayó al mar en septiembre de 2011 en Juan Fernández.
El máximo tribunal acogió los recursos de casación interpuestos por los abogados querellantes Alfredo Morgado, Maximiliano Delgado y Cristián Arias sólo en el aspecto que ordena investigar esos eventuales delitos por parte de personal de la Fach que planificó el vuelo.
El dictamen, citado por la agencia UPI, establece que "no obstante apreciarse que existe una investigación rigurosa respecto al cuasidelito de homicidio, del análisis de los recursos, aparece que lo que los reclamantes en definitiva censuran al tribunal de la instancia es haber excluido toda posibilidad de investigar la eventual comisión del delito de incumplimiento de deberes militares y la responsabilidad que se denunciaba respecto de terceros en esos hechos, no incluidos en la tripulación de la nave siniestrada, al negarse reiteradamente a realizar las diligencias de investigación pertinentes para el logro de esas pretensiones".
El 21 de marzo del año pasado, la Corte Marcial confirmó por unanimidad la resolución del ministro Juan Cristóbal Mera, quien sobreseyó la investigación al concluir que el accidente se debió a que la tripulación perdió el control del avión por haberlo volado "a una altura peligrosamente baja". Como las responsabilidades penales del piloto y la comandante del vuelo -tenientes Juan Pablo Mallea y Carolina Fernández- están extinguidas con su muerte, el juez dictó el sobreseimiento definitivo.
El fallo consigna que "aparece de manifiesto que la denuncia deducida y las diligencias pedidas por los perjudicados, en el legítimo ejercicio de sus derechos, se extendieron a personas diversas de la teniente Carolina Fernández y del teniente Juan Pablo Mallea, respecto de quienes se emitió sobreseimiento definitivo por su muerte, situación que claramente no acontece en relación a aquellos otros imputados, mencionados en los recursos, y respecto de hechos ajenos a la operación de la nave".
Jorge Luis Cabezón, el hermano del camarógrafo de TVN que murió tras la caída del Casa 212 en Juan Fernández valoró la decisión de la Corte Suprema que ayer ordenó reabrir la causa, enfatizando que "este es un paso para comenzar nuestro legítimo duelo".
"Estoy tranquilo, sereno y asimilando todo con mesura", recalcó a Emol, agregando que "las dudas que nosotros tenemos, el máximo tribunal las entendió perfectamente bien y es tranquilizador".
Ahora, agregó Cabezón, "hay muchas diligencias que solicitar, como por ejemplo la declaración de los cinco oficiales superiores que tienen mucho que decir".
Lo anterior, en alusión al excomandante del Comando de Combate, Luis Ili, al jefe del Estado Mayor del Comando de Combate, Guillermo Castro, al excomandante en jefe de la V Brigada Aérea, Julio Frías, al jefe del Estado Mayor de la V Brigada Aérea, Aldo Carbone, y al comandante del Grupo de Aviación N° 8, César Pineda.
Todos ellos, por su presunta responsabilidad en los delito de homicidio culposo y de incumplimiento de deberes militares.
Cabezón también aseguró que tras el fallo, la verdad "podría estar más cerca", siendo ésta "la única reparación posible". "Mientras más cerca de ella estemos, aún mejor", dijo.
El abogado Alfredo Morgado dijo que debería nombrarse un ministro en visita extraordinario que tome las declaraciones indagatorias de rigor. "Nosotros confiamos en la investigación que se pueda realizar y ciertamente esperamos que más adelante exista un pronunciamiento en torno a responsabilidades que hemos asignado", afirmó el profesional.