Extraña mortandad de garumas en el desierto intriga a los expertos
Un comportamiento anómalo está presentando un gran número de gaviotas garumas, situación que es investigada por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG).
Más de un centenar de ejemplares, perdidos en el desierto, han aparecido débiles o muertos. La situación es similar a la observaba el año 2013, cuando se encontraron polluelos o gaviotas juveniles, en distintos puntos del desierto cerca de Antofagasta.
Sin embargo, este año los hallazgos se han extendido a lo largo del territorio. Por ejemplo, han aparecido aves muertas en la Ruta B-24, que une Tocopilla y María Elena.
El SAG ya inició la toma de muestras de los ejemplares encontrados muertos. También se monitorea la cantidad de peses disponibles en la costa para así descartar la variable nutricional-oceanográfica.
Las garumas son la única especie que se conoce en el mundo, que construye sus nidos entre 20 y 100 kilómetros de distancia de la costa, proceso que llevan a cabo en los meses de octubre a febrero.
El esfuerzo que significa para los padres ir y regresar con alimento para sus crías, la convierte en una especia altamente sensible a los desequilibrios que puede generar el hombre en sus colonias.
"Durante el último tiempo hemos acudido al rescate de decenas de gaviotas garumas que, lamentablemente, han aparecido muertas o en una condición sanitaria bastante deplorable, con un estado de subnutrición, deshidratación y desorientación importante. Estamos haciendo los estudios para descubrir las causas de este fenómeno y descartando variables tóxico-infecciosas. Además, hacemos estudios para correlacionar los efectos humanos", manifestó el director regional del SAG, Alexis Zepeda.
La Ley 19.437 califica a las gaviotas garumas como una especie vulnerable. Se estima que si los factores que amenazan su supervivencia aumentan, podría pasar a ser considerada en peligro de extinción.
De ahí que es urgente descubrir por qué se está produciendo esta mortandad. Junto con ello, el SAG está determinando la ubicación exacta de las colonias para protegerlas.
El doctor en Biología Carlos Guerra, de la Universidad de Antofagasta, afirmó que en este periodo se han encontrado 300 polluelos muertos en distintos puntos de la región.
"Existen varias hipótesis, pero tratándose de polluelos al final de su crianza, es probable que disturbios en el lugar de anidación los hayan llevado a emprender vuelo sin un rumbo adecuado, como lo harían en forma natural con su grupo", manifestó.
Carlos Guerra agregó que es la primera vez que tiene registro de una mortandad tan grande y misteriosa en esta especie en Antofagasta.