La senadora Lily Pérez insistió en sus críticas a la mesa directiva de Renovación Nacional, partido que dejó el jueves acusándolo de "clasista", "personalista", "ultraconservador" y contrario a los liderazgos femeninos. Ayer, aseguró que incluso en la colectividad fue perseguida por su origen judío, lo que fue negado por todos los dirigentes.

A diferencia de lo ocurrido cuando comunicó su decisión, la parlamentaria ayer confirmó que apoyará al movimiento "Amplitud", la instancia creada por los también renunciados diputados Karla Rubilar, Joaquín Godoy y Pedro Browne.

"Nosotros vamos a armar a futuro un partido que esté orgulloso del legado del Presidente Piñera, que mire el futuro de la centroderecha (...) No estamos marcados ni por el Plebiscito ni por la Guerra Fría. No tenemos prejuicios y creemos en una derecha absolutamente moderna y liberal", dijo Lily Pérez a La Segunda.

El presidente de RN, Carlos Larraín, negó que alguna vez la discriminaran por algún motivo y afirmó que las renuncias son parte de "un esfuerzo para dañar el partido".

"Eso me da lástima porque el partido ha hecho mucho por muchas personas, por el país desde luego, y pienso que debiera haber más agradecimiento, porque los partidos somos importantes en lo institucional, los partidos nos están vinculados a personas individuales, aunque están movidos por personas", afirmó a CNN Chile.

RN sostendrá hoy una reunión del Consejo General, donde se debatirá la crisis de la colectividad y su futuro.