¡18 de septiembre!
"Septiembre nace con las banderas, El cielo es entonces una vasta fragua de colores. Las banderas recuerdan un oleaje. Septiembre podría competir con un millón de pájaros: ¡tantas alas tiene!...
El "18" se espera todo el año. Con el "18" triunfan los sombreros nuevos, el zapato cegador; con septiembre empieza la Primavera: y la Primavera aparece detrás del último ¡Viva Chile", detrás de la sombra de las banderas rezagadas, detrás de la estela de música de las "ramadas".
Parece que el "18" fuera número mágico: cuando rojea en el calendario, septiembre restaura el verde y los árboles empiezan a acicalarse; la naturaleza se cubre de alegre sensibilidad y hasta los rostros muestran una plenitud de savias que avanzan.
El "18" de mi niñez asoma pintado de blanco; es una intensa franja blanca; la apretada hilera de sombreros de paja viendo marchar a los soldados de la Patria.
"La empanada, con su apariencia de señora gordita, es un plato chileno de elocuentísima cordialidad. A veces diríase que concentra, íntegramente, el espíritu de nuestra gula. La empanada exige un ritual de cocina imposible de ignorar por una "buena dueña de casa". Compuesta de "masa" y de "pino", equivale a una joya del arte culinario nacional. Presenta su exterior de tibieza y suavidad de una barriga de niño sano y querido.
Cuenta la empanada con respetable biografía; ya la comió, en su cautiverio de 1629, Francisco de Pineda y Bascuñán, junto al cacique Maulicán. La empanada es una señorita de traje ceñido. En ocasiones pensamos que es una monja juguetona que trae escondidas, bajo sus polleras áureas, varias galas del cielo: aceituna, cebolla, huevos, trozos de carne…
Para amasar empanadas se necesita "tener mano"; si no se es dueño de livianura de pulso, de cierta misteriosa virtud, sólo se conseguirá una caricatura de empanada.
Durante las fiestas populares, la empanada ocupa sitiales de honor:
-¡Una empanadita, por favor!... -es regalo de afecto. La empanada debe remojarse en vino tinto para que el agrado estalle en vibración de salud."
¡Viva Chile!