"Se acabaron los acuerdos intramuros, de aquí en adelante hay que abrir la política"
A más de tres semanas del estallido social, el senador por Antofagasta y excandidato presidencial, Alejandro Guillier (Indep.), se refirió a las medidas que ha implementado el gobierno para avanzar en una solución.
En este contexto, el legislador fue crítico y destacó la importancia de que el Presidente Sebastián Piñera se abra a dialogar con la ciudadanía sobre las reformas estructurales que la sociedad está pidiendo.
Para esto, enfatizó en la necesidad de convocar a cabildos o plebiscitos y avanzar en una nueva Constitución.
Asimismo, cree que el Presidente se equivocó al convocar al Consejo de Seguridad Nacional (Cosena), y a la vez, presentar una agenda en materia de seguridad.
A más de tres semanas del estallido social. ¿Qué le han parecido las medidas del gobierno?
- Creo que el Presidente Piñera escaló el conflicto porque la imagen del jueves (reunión del Cosena) no tiene aparentemente mucha trascedencia por lo que dijeron los participantes, pero está el factor militar ahí, que es la señal que quiso dar.
El Presidente no está apuntando a recoger las demandas de la sociedad, sino al miedo para desmovilizar. Ahora, el cuadro que viene es insostenible por dos años más, si no hay definiciones políticas la gobernabilidad está en estos momentos en tierra de nadie, porque ni el Ejecutivo está dando conducción política, ni el Congreso, que es el segundo poder del Estado, está tomando el liderazgo. Entonces, vemos una enorme presión ciudadana sin conducción política y en ese escenario el factor incertidumbre se apodera.
¿Qué medidas se deben tomar?
- Primero, nosotros estamos tratando de alentar al Congreso para que tome la iniciativa política, si el Presidente no es capaz de dar conducción, que lo haga el Congreso, pero en éste priman las viejas prácticas de la política popular, en consecuencia no se abren a tomar un liderazgo abierto.
No solo hay que escuchar a la gente, hay que saber que de aquí en adelante se acabaron los acuerdos intramuros y hay que abrir la política, pero hay señales de esperanza.
Los alcaldes tomaron una decisión inédita, es la primera respuesta política de la crisis que está viviendo el país, porque llamaron a plebiscitos en sus comunas el próximo 8 y 9 de diciembre y le van a consultar a los ciudadanos.
Constitución
Modificar la Constitución es visto como algo relevante y que pide la ciudadanía...
- Sí, la gente se dio cuenta que si no cambias la Constitución no cambias nada. Por ejemplo, las AFP están consagradas en la Constitución, las isapres, las leyes laborales sobre todo en lo que refiere a negociación colectiva. Por lo tanto, no lo puedes tocar.
El miércoles estuvimos discutiendo en el Congreso una reforma constitucional para poder liberar el agua y restablecerlo como un bien público de derecho universal. Y no se alcanzó a votar, y no lo hicimos porque la derecha no se abrió a apoyar, salvo el senador Francisco Chahuán (RN) y otros ya amenazaron con ir al Tribunal Constitucional, o sea cuando se enfrentan reformas estructurales el oficialismo no da apoyo a esas reformas.
El gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet trabajo en esto, pero el proyecto no avanzó...
- Porque no hay voluntad de un lado ni del otro. Ya vemos lo que está pasando con la Reforma Tributaria, sale la prensa diciendo que se llegó a acuerdo entre los senadores de oposición y el equipo económico. Primero, yo soy senador de oposición y no tengo peregrina idea de lo que está pasando; y segundo, una reforma estructural la cocinarán entre tres senadores oficialistas y el equipo económico del gobierno cuando la estructura tributaria es una de las instituciones más importantes de un país.
Usted la semana pasada dijo que si hubiese estado en el gobierno esto no habría ocurrido. Sin embargo, muchos asocian esta crisis a demandas de hace 30 años...
- El malestar (sí) y nosotros lo captamos en la campaña. ¿Cuál es la principal demanda hoy de los chilenos?: Reforma Constitucional. ¿Qué planteé en el programa?: gobierno ciudadano, devolverle el poder a la gente para que ésta pueda entender que no todos los problemas se resolverán de inmediato, pero ellos quieren ver un camino. Entonces, no solo diseños, sino que abordar los problemas sociales como prioridad número uno, Piñera lo único que anuncia es crecimiento y empleo. Nosotros dijimos reformas sociales, habríamos tenido gente que se siente escuchada y priorizado reformas a la salud.
Y segundo enfrentado a un escenario de movilizaciones, lo menos que habríamos hecho es apalear a la gente, sino que abrir los canales. El Presidente de Francia, Emmanuel Macron, entendió después de tres meses apaleando gente en la calle que si uno habría el diálogo, esto no se resolvía. Lo abrió y mira cómo se distendió la situación, ¿por qué no aprendemos del vecindario?
¿No cree que comentarios como estos son muy soberbios?
- El discurso es: todos somos culpables, ergo nadie es culpable. No pues, él es el Presidente. Si todos los presidentes dijeran: oye perdóneme, no se quejen contra mí porque esto viene de 200 años de vida republicana. Entonces, quién es responsable de lo que pasa en Chile?, nadie.
¿Cuál ha sido el mayor error de los últimos 30 años?
- Encapsular la transición a la democracia. Todos los países democráticos tienen mecanismos de consulta ciudadana. Chile no tiene ni siquiera plebiscitos. Cuando los políticos no se ponen de acuerdo, ¿qué hacen los países desarrollados?, convocan a la ciudadanía a un plebiscito. Para eso existen los locales, regionales y nacionales. En cualquier elección en Estados Unidos y país europeo está lleno de plebiscitos paralelos, se eligen los senadores, diputados, pero además se le consulta a la ciudadanía.
"Hoy vemos una enorme presión ciudadana sin conducción política y en ese escenario el factor incertidumbre se apodera".