A lo largo de 12 cuadras por avenida Óscar Bonilla, desde la calle Pantaleón Cortés por el sur hasta la venida de Nicolás Tirado por el norte, se extiende la ramificación más grande de la tradicional "Feria de las Pulgas", ubicada en el sector norte alto de Antofagasta.
El crecimiento es exponencial considerando que la mayoría de los comerciantes que cuentan con permiso para vender sus productos en el sector (alrededor de 1.800) se concentran en la calle Pantaleón Cortés, teniendo como límite la calle Bandera al poniente y avenida Bonilla al oriente. No obstante, en este último límite la feria también se extendió hasta alcanzar la avenida Los Leones.
Si bien la problemática es histórica (se viene planteando desde 2005), a partir de septiembre del año pasado los límites se han ido abriendo cada vez más. El problema queda en evidencia especialmente los fines de semana y festivos, cuando se calcula llegan unos 4 mil comerciantes al sector.
Consecuencias
La desordenada proliferación de la feria también entorpece la circulación en la mayoría de las calles aledañas a este espacio, donde el tránsito de vehículos es prácticamente imposible. Un ejemplo se da en Sargento Candelaria, Gaspar Acosta, Almirante Grau o Mateo de Toro y Zambrano.
Asimismo, la mayoría de los comerciantes que cuentan con locales establecidos quedan bloqueados por la masa uniforme de carpas, toldos y particulares que sentados en el suelo, despliegan mantas con productos.
"Llega a ser curioso que en algunos lugares debes pedir permiso para caminar siendo que estás transitando por la vía pública. Yo entiendo que muchas de estas personas, si bien están en la informalidad, necesitan un ingreso. Nadie conoce la necesidad del otro. Pero debería al menos existir un orden entre ellos mismos para permitir la circulación de los habitantes del lugar y otras personas", dijo una vecina.
"Buena convivencia"
Fue en junio de 2017 cuando representantes de los comerciantes legales de feria firmaron un "Manual de Buenas Convivencias y Seguridad" con el municipio, a fin de evitar la propagación del comercio informal.
El documento establecía sanciones ante los incumplimientos, como por ejemplo, dos advertencias verbales que quedarán consignadas en un libro de actas para los comerciantes ilegales.
Pero a más de un año del acuerdo, el comercio sigue su crecimiento. A simple vista pareciera algo que se agudiza, dado que a pesar de que transitan carabineros por el sector, éstos son ínfimos ante la cantidad de personas que comercializan.
Cocinerías
Otra cosa preocupante que se percibe en el sector (que va por Bonilla) es la presencia de al menos cuatro cocinerías donde se ofrecen almuerzos y colaciones, cuyos clientes pueden consumir los alimentos en sillas y mesas dispuestas bajo toldos. El problema es que estos están levantados en pleno terreno baldío, en piso de tierra.
También la fiscalización pareciera ser escasa dada la cantidad de comerciantes de alimentos que, sin contar con ningún tipo de medidas sanitarias, ofrecen sus productos. Un ejemplo, gallinas y pollos dentro de un balde, con solo un quitasol como medida preventiva para que la mercancía no se descomponga por el sol.
Asimismo, una de las comerciantes ilegales que se instala con sus productos casi llegando a Nicolás Tirado, cuenta que ella fue "desplazada" por otros grupos más violentos.
"Antes yo me instalaba en las cercanías de Pantaleón Cortés, pero después comenzó a llegar gente nueva y muy conflictiva que se tomaban los espacios o nos corrían. Es como una especie de anarquía que se vive en las inmediaciones de la feria, porque obviamente allá es donde pasan más clientes. Por eso la mayoría nos comenzamos a correr más al sur", cuenta la mujer.
Medidas
Durante los últimos concejos comunales de seguridad pública en el municipio, en la cual participó la gobernación, Policía de Investigaciones (PDI) y el jefe de la Dirección Seguridad Pública, se abordó el tema del comercio irregular.
A su vez el director de Dideco de la Municipalidad, Ignacio León, manifestó que "hemos visto como desde hace un tiempo la Feria de las Pulgas ha ido creciendo inorgánicamente y por ello han sido múltiples las acciones que hemos tomado como Municipalidad".
León detalló que "la principal acción es el trabajo mancomunado entre Fomento Productivo y los dirigentes para ir al límite actual que tiene la Feria y luchar contra el comercio ambulante ilegal".
También manifestó que se aumentarán las fiscalizaciones con los equipos de Seguridad Ciudadana en el sector.
"Es una batalla constante, porque mientras vamos multando y fiscalizando, algunos otros llegan de nuevo, y así suma y sigue", apuntó.
comenzó a tomar forma la feria de las pulgas, la que 21 años después cuenta con 1.800 comerciantes legales. 1992