Entre fiestas
"Creo que esta vez deberíamos centrarnos en la estrategia de desarrollo regional".
Hay en la de navidad una cantidad tal de contradicciones que puede estresar al mas operado de los nervios. Teóricamente se celebra el nacimiento del niño dios quien en condición de migrante era portador de buenas noticias. Nosotros lo transformamos en un festival del consumo. Pero, nuestros hijos y nietos nos sorprenden distinguiendo con su natural sabiduría, lo importante de lo secundario, entreteniéndose más con las cajas en que vienen los juguetes que con los caros y sofisticados juguetes propiamente tal.
Así con cierto estupor vemos que la simpleza del envoltorio cautiva y lo sofisticado y tecnologizado del juguete queda en un relegado segundo lugar señalándonos que, si de jugar se trata, los recursos económicos no son lo fundamental
Ahora nos toca la segunda patita la del año nuevo donde los buenos deseos para el próximo año abundan y nos desbordamos en desear ventura para los próximos 365.
¿Como región que podríamos desearnos? Creo que esta vez deberíamos centrarnos en la estrategia de desarrollo regional. Este artefacto que opera o debería operar como una suerte de carta de navegación de la región en la búsqueda del desarrollo es un elemento crucial para la toma de decisiones coherentes y sinérgicas que permiten aproximarnos optimistas a los escenarios futuros.
Días atrás se realizó una reunión, foto incluida, del actual intendente con intendentes de periodos anteriores para reflexionar en torno a esta tarea. Además de los resquemores y criticas sotto voce que despertó en los distintos sectores involucrados la señal es buena y necesaria puesto que la nueva estrategia regional tendrá que liderarla el gobernador regional electo.
Este hecho demanda cuestiones adicionales a la mencionada estrategia pues se pretende definir ahora lo que debería guiar a un futuro electo gobernador lo que exige un mecanismo de elaboración que dé garantías a moros y cristianos de la legitimidad, amplitud, participación y transparencia que deberán caracterizar al artefacto regional.
Sabemos ya que el problema, mas que de derechas o izquierdas, en torno a estas materias es centro periferia y por tanto nuestros adversarios están en la metrópoli pues son ellos los que sienten que pierden mientras nosotros ganamos mínimos espacios de autonomía en la toma de decisiones en la región por tanto el debate no debería resultar muy complejo entre regionales.
No solo bastara pensar la estrategia, sino que además movilizarnos en todos los sentidos para que al futuro gobernador regional se le dote de atribuciones para que el ejercicio democrático de dibujar nuestro futuro no quede transformado en letra muerta. Además, obviamente, de los recursos económicos que le den sustento y una capacidad vinculante que permita tomar decisiones con coherencia.
César Trabucco
Sociólogo y académico Universidad de Antofagasta