Redacción
Lo anticipó el concejal Luis Aguilera la noche del viernes y lo refrendó el Municipio la tarde de ayer: El club nocturno "Palomino" no abrirá sus puertas, al menos en el sector que tenía pensado.
El centro de entretención nocturno arrendó un local en Antonino Toro con Galleguillos Lorca, sin embargo no se contaba con la oposición de los vecinos del tradicional sector residencial.
La noche del viernes, ellos se reunieron con varios concejales. Allí, el edil Luis Aguilera les aseguró que el proyecto ya no se realizaría.
Aguilera explicó que más temprano habló con el dueño del local, quien le habría dicho que ante las críticas prefería terminar el contrato.
Ordenamiento
Ayer, por medio de un comunicado, el Municipio de Antofagasta, precisó que tienen un compromiso enviado al ayuntamiento por el dueño del inmueble en el que se asegura que el contrato con los empresarios no se llevará a efecto.
Se añadió que a futuro se estipulará una cláusula que prohíba la instalación de locales de estas características en esa zona de la capital regional.
"Queremos manifestarle a usted nuestro compromiso con la ciudad y con los vecinos del sector, y a la vez señalarle que hemos declinado de celebrar un contrato para la explotación de ese tipo de negocios, ratificando nuestro compromiso con la ciudad y vecinos", dice la misiva que detalló la casa consistorial.
La alcaldesa Karen Rojo detalló que "afortunadamente el dueño del local entendió que lo más importante es la tranquilidad de la comunidad, a pesar que la patente de cabaret estaba vigente desde hace 20 años".
Según el concejal Aguilera, el dueño del recinto había firmado un contrato a 20 años con los encargados de "Palominos", una marca presente en la exclusiva comuna de Vitacura, en la Región Metropolitana.
Los detalles del arribo de "Palomino" se conocieron por los trabajos ejecutados en el lugar (antes funcionó el restaurante "Che Ignacio") y por la publicidad emitida.
También se hizo una "fanpage" en Facebook (que hoy está sin contenidos) donde se anunciaba su pronta llegada a la ciudad.
En su publicidad, se destacaba el lujo y exclusividad de sus instalaciones. El local se promocionó como un "gentleman's club" (un club de caballeros).
PROPIETARIOS
Uno de los hechos más llamativos es el celo con que se han mantenido los nombres de los propietarios del local en cuestión. Hasta ayer se sabía que una familia antofagastina es la dueña, la que sería apoyada por un abogado de la plaza, entre otros actores, todos locales. Trascendió que de las conversaciones participaron varios conocidos vecinos quienes sugirieron al propietario desistir de la idea.
vecinos participaron en una protesta que se realizó el viernes en Antonino Toro. 50