El inmunólogo estadounidense James P. Allison, galardonado hoy con el Nobel de Medicina, opinó que la inmunoterapia se generalizará como parte del tratamiento contra el cáncer que reciban todos los pacientes de aquí a 5 años.
"Después de muchos años de resistencia, el campo del cáncer comienza a aceptar la inmunoterapia como un cuarto pilar, junto a la radioterapia, la cirugía y la quimioterapia, en las terapias contra el cáncer", dijo el científico en una rueda de prensa en Nueva York.
Allison dijo ansiar que la inmunoterapia se use en combinación con las otras tres, y aseguró que "no va a sustituirlas, sino que va a formar parte de la terapia que todos los pacientes reciban en 5 años aproximadamente, y va a ser curativa en muchos de ellos".
La Asamblea Nobel del Instituto Karolinska de Estocolmo premió hoy por primera vez los estudios de terapia contra el cáncer al otorgar el galardón conjuntamente a Allison y al inmunólogo japonés Tasuku Honjo, que han establecido nuevos principios en la lucha contra esa enfermedad.
Su trabajo ha revolucionado el tratamiento contra el cáncer de pulmón o el melanoma y varios tipos en fase metastásica, y ha cambiado fundamentalmente la forma de combatir ese mal, según el fallo alcanzado por la organización, ya que su estrategia se centra en el sistema inmunitario en lugar de las células cancerosas.
Allison alabó el trabajo de Honjo, a quien le une una relación profesional desde hace 30 años y quien descubrió en 1992 la proteína PD-1, un inhibidor de las células inmunitarias T que ayuda a controlar las respuestas inmunitarias del cuerpo.
Todavía sorprendido por el premio y optimista de cara al futuro, Allison dijo atreverse a utilizar, pese a ser "peligroso", la palabra "cura", al ser preguntado por el impacto de la inmunoterapia.