San Lorenzo, Patrono de los Mineros
Las fiestas religiosas consideradas más importantes del Norte Grande son cuatro: Ayquina, al interior de la Región de Antofagasta; las Peñas, en la Región de Arica y Parinacota; la Tirana y San Lorenzo, en la Región de Tarapacá.
Estas celebraciones son parte del Culto Mariano, con fuertes raigambres andinas. La imagen de la Virgen María es venerada como la madre generosa. San Lorenzo como el Santo patrono de los mineros, que "nos protege y nos cuida, pero también nos castiga si no cumplimos", en el decir de los devotos, que viven emocionados el momento de la procesión y el saludo final al regreso, cuando se cierra el círculo del eterno retorno.
Con su templo que data del siglo XVII y representativo del estilo sur Peruano, este lugar enclavado en la Quebrada de Tarapacá, fue sitio de varios hechos bélicos. Ocupado por Tupác Amaru II y Tomas Paniri, en los albores independentistas del Perú, también fue invadido por tropas Bolivianas que reclamaban para sí toda la provincia al sur de Perú, pero fueron expulsados por los propios Tarapaqueños. En noviembre de 1879, las tropas Chilenas fueron emboscadas en esta quebrada, sufriendo considerables bajas.
Hoy el pueblo de San Lorenzo es un importante lugar de peregrinación para sus devotos, los que, cada 10 de agosto, en diferentes vehículos e incluso a pie, bajan las sinuosas curvas hasta llegar a instalar sus carpas a orillas de un pequeño curso de agua, que refresca en algo el fuerte calor nortino.
Cuenta la leyenda que los portadores del Santo deben ir con algunos "tragos de más" porque si no, el Santo no permite que se muevan.
Este pequeño poblado, que es adornado con los colores rojo y amarillo, por la nacionalidad española del Santo, recibe a los visitantes, mientras que Diablos, Tinkus y Morenos, al compás de sus bandas, realizan sus mudanzas en las estrechas y polvorientas calles y en la Plaza, frente al templo, en honor al Patrono de los Mineros, San Lorenzo de Tarapacá.
Omar Villegas A.