Familias siniestradas: "Todo nuestro esfuerzo se quemó"
RECONSTRUCCIÓN. Fueron cuatro las viviendas que resultaron completamente quemadas en el campamento del sector norte alto, "Chile Nuevo".
"Lo que pasó fue horrible... cuando lo escuché no supe como reaccionar, no sabía si moverme o quedarme donde estaba, todo mi cuerpo comenzó a temblar".
Así, la antofagastina por adopción, quien llegó desde Colombia hace dos años, Jadira Mosquera, describió cómo fue el darse cuenta que la casa que mantenían en el campamento "Chile Nuevo", emplazado en el sector norte alto de la ciudad, se quemó después de dos amagos de incendios que su mismo esposo y vecinos habían mitigado horas antes.
Según relató, fueron grupos de personas con problemas de drogadicción, quienes al intentar abrigarse durante la noche, prendieron las llamas que horas después, alcanzaron las viviendas siniestradas.
"Mi esposo y la vecina de al lado, fueron quienes apagaron las primeras llamas que se habían ocasionado por las fogatas que mantenían durante la noche estas personas. La primera vez fue como a las seis de la mañana cuando ya se habían ido, pero después volvió a comenzar", relató.
Palabras a las que se sumó su esposo, el también colombiano Hernán Caicedo, quien vive en el lugar hace solo dos años.
Según su relato, el problema que mantienen con estas personas, es algo que viene ocurriendo hace ya unos meses en el campamento, ya que después de que las autoridades los sacaran de la zona centro, éstos comenzaron a llegar a los cerros buscando refugio.
"Esta es una lucha que nosotros hemos mantenido durante bastante tiempo. Ellos vienen a consumir pasta (base) acá al cerro. Ellos son los que en las noches queman basura para abrigarse, y esa es la lucha que siempre hemos tenido con ellos, y de allá (centro) los han sacado y se han venido para acá, y nosotros siempre sacándolos", precisó Caicedo.
Relato
El bodeguero de oficio, manifestó que después del primer amago de incendio (a las 6 horas), hubo otro pasada las 11 horas, llamas que alcanzaron a mitigar tirando tierra encima, no obstante, advirtió, una vez se fueron a trabajar, cuando ya nadie estaba en la casa, las brasas comenzaron un nuevo incendio que nadie pudo evitar.
"Quedamos sin nada, totalmente sin nada. Dos años de lucha en este país para que después todo se quemara. Documentos, ropa. Todo se quemó, lo perdimos todo (...) afortunadamente ninguno de los integrantes de las familias que sufrieron este incendio tuvieron que lamentar una fatalidad, gracias a Dios", comentó.
Reconstrucción
El coordinador de intervención de Techo Chile, Jonathan Cea, manifestó que una vez enterados de este nuevo siniestro (hubo uno la semana pasada en el sector de Los Arenales), inmediatamente se pusieron en contacto con las familias siniestradas a fin de poder determinar de qué forma, como fundación, podían ayudar en este caso.
"Cuando pasó todo el acontecimiento, nos dirigimos a 'Chile Nuevo' para ver de qué manera podíamos ayudar (...) sabemos que por parte de Techo Chile existe la posibilidad de poder incidir con una pequeña vivienda prefabricada dependiendo de los metros. Vamos a hacer un trabajo de reconstrucción junto a las familias y algunos voluntarios, en un proceso que ya estamos iniciando", precisó el coordinador regional.
Quemas de basura
El comandante de Bomberos de Antofagasta, Christian González, explicó que uno de los factores que incide en el tema de incendios dentro de los campamentos, es precisamente la quema de basura. También se cuentan las irregulares conexiones eléctricas y, aunque en menos casos, las venganzas por riñas donde se queman las casas.
A julio del año en curso, han habido 122 llamados por fuego que no pasaron a incendio y 29 incendios, de ellos cinco en campamentos.
"Sentí mucha impotencia, me bajó la sangre a los pies, sentí que había perdido todo y así fue".
Jefferson Quiñones, Damnificado en incendio"
"Esto que pasó fue horrible. Cuando lo escuché no supe como reaccionar, no sabía si moverme o no".
Jadira Mosquera, Vecina damnificada"