Con la expectativa de repetir su actuación de hace cuatro años en Brasil, donde llegó hasta los cuartos de final, hoy inicia su participación en el Mundial Costa Rica que se enfrenta a Serbia. "Es una ambición, pero sabemos que los favoritos del grupo son Brasil y Suiza", dijo el técnico centroamericano, Óscar Ramírez.
Tras 36 años de ausencia de Perú en los mundiales, la comunidad incaica residente en Antofagasta esperó demasiado para ver redebutar a su selección en este torneo, que en estos momentos se esta realizando en Rusia y ayer a las 12 horas lo hicieron ante Dinamarca.
Si bien el equipo perdió 1-0 (ver página 22), este mostró buen juego, además destacaron figuras como André Carrillo y Christian Cuevas. Desde temprano, familias y amigos repletaron las principales calles del centro de la ciudad, entre ellas Latorre, Condell y Baquedano.
En esta ocasión, el restaurante Cuzco, que dispuso una TV de 60 pulgadas con dos parlantes grandes, fue uno de los lugares predilectos de los peruanos para realizar la previa y apoyar durante 90 minutos a su selección, que desde el 2015, es liderada por argentino Ricardo Gareca.
A contar de las 11 horas, poco a poco los seguidores del Rímac comenzaron a llegar al lugar, unos con bombo, globos y trompeta. Muchos de estos hinchas del histórico Alianza Lima.
Al ingresar al local y específicamente en el segundo piso, gritos como "vamos Perú carajo" y "olé olé, soy peruano" se hacían sentir bastante fuerte. Sólo a minutos de que comenzara el compromiso, ya habían aproximadamente 60 personas.
Rostros de emoción, alegría pero a la vez de preocupación es lo que se visualizaba. Apenas el árbitro de Gambia, Bakary Gassama, dio el pitazo inicial, los aplausos aparecieron de forma totalmente espontánea.
A dos minutos de iniciado el partido, se produjo la primera polémica. Tras un excelente centro, el mediocampista peruano Edison Flores, cayó en el área rival debido a un empujón del delantero Yurary Poulsen
De manera casi instantánea los hinchas hicieron sentir su malestar por que no se cobró el penal, donde frases como "que estás pensando" y "que carajo cobraste", fueron tan sólo algunas de las expresiones dirigidas al juez del duelo.
En ese entonces y hasta el 20, Perú era muy superior a Dinamarca y las personas presentes sabían que era la gran oportunidad de marcar el primer tanto, el encuentro se había transformado en un monólogo, los europeos no aparecían.
Paralelo a esta situación, los incaicos presentes estaban muy nerviosos e intranquilos. Unos se paraban y se movían reiteradamente, mientras que otros pedían reiteradamente cerveza al garzón de turno.
Uno de los peruanos ubicados en la mesas aledañas, quien además lo acompañaba su hijo de al menos 7 años, se tapaba la cara cada vez que Cristian Cueva y Jefferson Farfán disparaban al arco y este no tenía un final feliz, gritando "como es posible, póngale huevos".
A medida que pasaba el tiempo, Dinamarca comenzó a aproximarse con mayor peligro a la portería de Pedro Gallese. Aquello no fue impedimento para que la hinchada siguiera tocando junto al tambor y la trompeta "vamos, vamos peruanos, que esta tarde tenemos que ganar". A esa altura la mayoría estaba afónico.
No hay duda que todos querían desahogarse, ya que la última vez que pudieron hacerlo fue en España 82, con anotación de Guillermo La Rosa en la derrota de 5-1 ante Polonia. De hecho la oportunidad de inflar las redes en un mundial tras 36 años, llegó, esto tras un penal cometido a Cueva.
Todos estaban eufóricos, algunos llorando y abrazando a sus cercanos, se miraban con incredulidad. Lamentablemente aquello duró un par de segundos, porque el mismo jugador fue el que elevó el tiro.
Ocurrido aquello, la gente del país vecino no lo podía creer. Inmediatamente reaccionaron tirando muy lejos lo primero que se encontraban, agarrándose la cabeza, pidiendo explicaciones y lanzando disparates al exUnión Española.
Pero eso no fue todo, ya que 15 minutos más tarde vino la desolación total. Los daneses y a través de Poulsen anotaron la apertura de la cuenta. De hecho varios salieron a tomar aire y luego ingresaron al local.
Minutos más tarde Paolo Guerrero y con un taquito de ensueño, tuvo en sus pies la paridad. Los albirrojos estallaron y se levantaron de sus asientos enérgicamente, varios tendieron a arrodillarse.
El segundo tiempo no fue para nada distinto. El Rímac tuvo demasiadas oportunidades e incluso de dar vuelta el resultado. Si bien no pudieron conseguir un triunfo, los hinchas abandonaron el restaurante cantando y se mostraron confiados para los próximos partidos ante Francia y Australia.
Una de las asistentes, Vivian Carmen Gonzaga, confía en que Perú avanzara de ronda.
"Jugamos muy bien pero hay que seguir, nada está perdido, vamos a luchar hasta el final y estoy segura que clasificaremos. Nosotros continuaremos apoyando a la selección en los próximos compromisos", comentó.
Por su parte Leheder Carmen Gonzaga, señaló estar feliz, pese a la derrota en el debut de este Mundial.
"Estamos súper contentos y agradecidos con la selección, porque a pesar de que fue un partidos duro y perdimos, el equipo dio lo mejor y jugó demasiado bien. Esperamos que en los otros dos partidos poder salir adelante", indicó.
Finalmente Rafael Alvites, expresó que "ver a Perú tras 36 años, es algo emocionante y de mucha satisfacción. Triste por la derrota pero se que podemos conseguir resultados positivos. ¡Arriba Perú!
Vivian, Carmen,, hincha
peruana"
"Jugamos muy bien pero hay que seguir, nada está perdido, vamos a luchar hasta el final y estoy segura que clasificaremos".
Leheder, Carmen,, hincha, peruano"
"Estamos súper contentos y agradecidos con la selección, porque a pesar de que fue un partidos duro y perdimos, el equipo dio lo mejor".
Rafael, Alvites,, hincha
peruano"
"Ver a Perú... es algo emocionante y de mucha satisfacción. Triste por la derrota pero se que podemos conseguir resultados positivos"."
La presencia James Rodríguez, es la principal incógnita de la selección colombiana para su primer partido mundialista frente a Japón. El volante del Bayern Munich padece, según el cuerpo médico "cafetero", sólo una fatiga muscular. Pese a ello el técnico argentino José Pékerman analiza variantes.
El delantero Mohamed Salah completó ayer su primer entrenamiento con Egipto en el Mundial. Salah, de 26 años, no jugó en la derrota de su equipo el viernes ante Uruguay (0-1), porque el seleccionador Héctor Cúper prefirió no arriesgarlo tras su lesión en el hombro izquierdo. El ariete reaparecería el martes ante Rusia.