Felipe Contreras Reyes
Antofagasta creció como ciudad, no obstante, también las emergencias. Así lo reportan estadísticas de Bomberos de Antofagasta, institución que atendió 56% más emergencias que hace cuatro años. Lo anterior producto del crecimiento de la población, el hacinamiento y la gran cantidad de construcciones ligeras.
Así, desde 2014 la institución pasó de salir a 504 procedimientos de magnitud, a 789 en 2017 (ver gráfico), y 1.321 si se consideran otras situaciones de riesgos como las quemas de basura y autos incendiados.
Según explican desde Bomberos, la situaciones de riesgo han aumentado especialmente en campamentos como La Chimba y sectores altos de la ciudad, lugares donde existe una gran cantidad de viviendas informales, muchas construidas con material altamente inflamable.
Hacinamiento
Según explicó el comandante de Bomberos, Christian González, las emergencias se volvieron más frecuentes en hogares donde existe situación de hacinamiento.
"Viviendas que en algún momento estaban destinadas para una familia de cinco personas, hoy encontramos hasta diez personas viviendo. Por tanto aumenta el consumo de energía y la cantidad de aparatos conectados", explicó.
Desde la institución también indicaron que el hacinamiento y las construcciones precarias fomentan la instalaciones irregulares de servicios que demandan energía, lo cual aumenta el riesgo de accidentes.
El jefe de la carrera técnica de Prevención de Riesgos de la Universidad Arturo Prat, Ricardo Hernández, recordó que las construcciones autogestionadas son peligrosas, pues no cumplen con ningún estándar fiscalizado en otras viviendas.
"No tienen ningún dispositivo como un interruptor automático, eso implica directamente que al no cumplir ningún estándar es muy fácil que la energía eléctrica se transforme directamente en fuego", comentó al respecto.
Asimismo, el experto advirtió que resulta necesario aumentar las precauciones durante el invierno. Esto porque el uso de estufas, braseros o incluso quema de madera pude causar estragos.
Urbanización
Por su parte el asesor en Planificación Urbana, Ulises Gómez, comentó que sería ideal que la Dirección de Obras Municipales incluyera cuarteles de bomberos en su plan regulador acorde a la cantidad de habitantes.
"Debieran determinarse por densidad. El único que está ganando ahí es el sector inmobiliario que está vendiendo terreno, pero la ciudad se extiende más, y los servicios para atender las emergencias son voluntarios", explicó.
Por su parte el director del magíster en Arquitectura de la Universidad Católica del Norte, Claudio Galeno, apuntó que el clima de Antofagasta permite construcciones precarias. Asimismo, indicó que en el centro también han surgido ampliaciones cuestionables a partir de edificios autorizados.
"Hay muy poco control sobre todo en este tipo de construcciones pequeñas pero que son irregulares y no tienen ningún tipo de fiscalizaciones. Los planes y proyectos deben pasar por la municipalidad, pero este tipo de cosas de menor escala parece ser que no hay una capacidad de control", concluyó el experto.