David Aguilar folk mexicano
El sábado que recién pasó, tuve la oportunidad de ver en vivo a David Aguilar, músico mexicano que se presentó en un pequeño bar en Providencia, ante un público de no más de 40 personas, la gran mayoría músicos. Este detalle no es menor, ya que si uno se detiene a "desmenuzar" las hermosas canciones que Aguilar toca, están llenas de arreglitos y armonías complejas, dentro de un formato de canción Pop que llamarán la atención a los colegas de oficio. Algo que es el sello característico de su música, es el uso del silbido como parte importante de al menos la mitad de su repertorio.
"El David Aguilar", como se hace llamar en sus redes sociales, es un tipo sencillo y conectado con el público. Parece ser un amigo que conoces hace mucho tiempo, cuenta con esa característica que tienen muchos mexicanos que es la calidez y simpatía. Digo esto porque al final de su show, y como no sucede usualmente, al menos en Chile, se acercó mesa por mesa para rescatar apreciaciones de su concierto de los que nos encontrábamos ahí. Una actitud sencilla y desinteresada, ante observadores talentosos como él, tales como Mon Laferte, Francisca Valenzuela, el antofagastino Eric Mondaca "Charay", Pedro Piedra, entre otros que se encontraban en el lugar. Como dije anteriormente la mayoría del público eramos músicos -siempre tocar ante músicos es estar en un examen de grado-, ¿por qué será así? ¿mucha evaluación y actitud crítica?
Llegué a la música de Aguilar a través de otro amigo músico, hace un par de años, como sucede usualmente, de manera inesperada. Mi amigo se encontraba tocando algo de Aguilar en su guitarra y me dijo: "deberías escuchar a este tipo hace música muy emotiva". Efectivamente eso es David Aguilar, un ser emotivo que habla a través de su guitarra y su voz casi susurrada.
Aunque en su discografía (6 discos editados de forma independiente), se pasea por estilos como la ranchera, polka, bossa nova, pop, hay un sello distintivo en sus letras; pequeños poemas musicalizados, en donde cada palabra está cuidadamente puesta, tal como dice en "Los árboles": "mi canción sólo un grito más, entre los estudiantes del aire".
Carlos
Montivero,
musico
de Wentru