Felipe Contreras Reyes
la "Bomberotón"
Uniformes quemados, mangueras rotas y salvavidas en mal estado son algunas de las herramientas que posee Bomberos entre su equipamiento. Los voluntarios pretendían reemplazar estos materiales con la recaudación de la "Bomberotón", pero la campaña no alcanzó su meta ideal.
Así, de los $150 millones requeridos por los voluntarios, solo consiguieron $122 principalmente gracias al apoyo de la comunidad. Ahora los bomberos temen que el déficit de recursos se amplié durante el próximo año.
En palabras del superintendente de Bomberos, Paulo Rodríguez, "tenemos requerimientos anuales. Si los sumamos a lo que nos faltó recaudar este año, la cifra (de déficit) aumentará 30 millones más".
Además, próximamente comenzará a operar la Novena Compañía de Bomberos, razón por la cual esos gastos de operación podrían elevarse por sobre los $180 millones.
Ayuda empresarial
"Queremos hacer una actividad con números aterrizados el próximo año, no estar pidiendo $200 o $300 millones porque probablemente no los vamos a conseguir", lamentó el superintendente.
Lo anterior impulsó a la institución a requerir el apoyo de empresas privadas, quienes serían la fuente económica más factible para completar los $150 millones necesarios.
"Queremos sensibilizar a las principales empresas de la región, que sí tienen la posibilidad de hacer los aportes con responsabilidad social empresarial, para que nos ayuden a completar nuestra renovación de material", dijo Rodríguez.
Solamente equipar a un bombero de pies a cabeza cuesta un millón y medio de pesos. Esto considera meramente pantalones, chaqueta, botas, cascos y la esclavina (una tela ignífuga usada para proteger la cabeza).
El comandante de Bomberos, Christián González, reafirmó que este llamado no pretende pedir nuevamente a la ciudadanía sino directamente al empresariado.
Riesgos
"Es necesario recordar que la mayoría de las industrias se encuentran actualmente ubicadas fuera del radio urbano, por lo tanto hay necesidad de llegar con el personal debidamente equipado", explicó.
González no solo puso énfasis en las necesidades técnicas, sino también en los riesgos cotidianos de la profesión.
"Tenemos mangueras y equipos de trabajo en mal estado, que son necesarios para que intervengan con la seguridad que corresponde para no verse afectado por un accidente", afirmó.
Un caso simbólico en la compañía es el del voluntario César Montenegro, quien se desempeñaba como colectivero hasta un accidente en diciembre de 2016.
La situación ocurrió durante un rescate en el borde costero, momento en que una ola alcanzó al grupo de búsqueda y provocó graves lesiones en las piernas de Montenegro, quien no ha vuelto a trabajar.
"Él estaba con un equipo de bomberos, pero no con uno especializado para la zona. Estos tienen un alto costo y no alcanza para todos los funcionarios", argumentó el comandante González.
OTROS PROBLEMAS
Según cuenta el teniente cuarto de la Cuarta Compañía de Bomberos, Cristián Pérez, actualmente bomberos están obligados a trabajar con materiales altamente fatigados.
"En Estados Unidos los equipos están hechos para durar cinco años, en cambio aquí le sacamos provecho hasta cuando podemos", dijo.
Pérez, quien es paramédico en la Unidad de Neonatología en el Hospital Regional, asegura que estos equipos desgastados son incluso una mejora respecto a los utilizados antes.
"Creo que hace cinco años atrás eran casi disfraces de bomberos", recordó Pérez.
Los materiales más necesarios son los equipos de respiración autónoma, cuyo costó ronda los $1,7 millones. Para esto, la institución pretende conseguir 100 botellas de repuestos, las cuales permiten sobrevivir entre 10 y 15 minutos en ambientes tóxicos.
Sin embargo, el desgaste y los incidentes no son los únicos problemas que sufren las compañías. A éstos se suma la sustracción de material durante las emergencias, lo que ahonda las dificultades económicas.
Así cuenta Bryan Díaz, joven de 21 años que trabaja en el sector minero. No obstante, dedica cuatro de sus siete días libres a la Octava Compañía.
"A veces vamos a emergencias en zonas altas. La gente entra al carro para tratar de ayudar, pero en realidad lo desmantelan. Hay carros que han recibido piedrazos en los parabrisas", afirmó Díaz.
Por su parte Valeria Rivera, quien es bombera hace sólo seis meses, asegura que el material actual presenta dificultades de movilidad que hacen más complejas las tareas.
"El equipo es pesado, estamos buscando que sea uno que nos permita movernos con más habilidad. Además tienen vida útil y se va perdiendo cuando se superan los 60°C", comentó.
Actualmente las autoridades de bomberos tienen una planificación de los gastos necesarios (ver infografía). Concluyen que la prioridad serán los equipos básicos, pero se reducirá su capacidad en comunicaciones.
Cristián, Pérez,, teniente"
"Aún faltan equipos de respiración y es un desgaste rápido de producto de los golpes y las caídas de objetos".
Valeria, Rivera,, voluntaria"
"Últimamente hemos tenido muchas emergencias seguidas que han hecho que el material se desgaste rápidamente"."
Bryan, Díaz, voluntario"
"A veces vamos a emergencias en zonas altas. La gente entra al carro para ayudar, pero en realidad lo desmantelan"."
$150 millones requieren los bomberos para la renovación de material. Ésta solamente corresponde a los gastos del próximo año y necesitarán realizar una nueva colecta en 2018.
100 botellas de repuesto necesitan comprar para las distintas compañías de bomberos. Estos son para los equipos de respiración autónoma, que permiten sobrevivir 15 minutos en los incendios.
2 etapas tendrá la actualización de comunicaciones de bomberos, cada una costará $70 millones y permitirá realizar las transmisiones desde un nuevo carro donado por la Embajada de Japón.