En menos de dos meses vuelven a fallar las sirenas de tsunami
INVESTIGACIÓN. El error afectó a tres comunas y generó críticas a la Onemi. La institución ordenó un nuevo sumario administrativo, el segundo en el año.
"Profe están sonando las alarmas de tsunami".
"Tranquilos voy averiguar qué está pasando, probablemente sea un error".
Ese fue el diálogo que el director del Centro de Mitigación de Catástrofes Naturales de la Universidad de Antofagasta, Jorge Van Der Bosch, asegura haber sostenido con sus alumnos mientras sonaban las sirenas de tsunami en la costa de Antofagasta.
Cerca del mediodía de ayer se activaron por error un número indeterminado de sirenas en Antofagasta, Mejillones y Tocopilla, causando sorpresa en la población.
El episodio generó reacciones en las redes sociales y fue recogido por medios de comunicación nacionales, que informaron ampliamente del caso.
Credibilidad
Jorge Van Der Bosch aseguró que una de las consecuencias de estas fallas es la pérdida de confianza de la comunidad, lo que ante una emergencia real puede tener consecuencias serias.
El profesor de la Universidad de Antofagasta aseguró que cuando sonaron las sirenas su obligación era evacuar a los estudiantes. "Pero pasa que uno sabe que este sistema puede fallar y tiende a dudar. Lo que yo hice no debería pasar, pero ocurre", agregó.
Van Der Bosch insistió en que el gran problema que tienen las falsas activaciones de alarmas de tsunami es que la comunidad comienza a tener una "consciencia al error".
"En esa duda hay minutos valiosos que se pueden perder. Tengo la impresión de que hay una falta de mantención de este sistema. Además creo que faltan técnicos para hacerlas", comentó el experto.
Las fallas en el sistema de alerta de tsunami no son nuevas. En el simulacro nocturno de 2012 , cuando fue probado por primera vez, sólo una parte de los equipos se encendieron, generando las primeras dudas. Luego, en marzo de 2015, se registró una nueva falla. En ese episodio, se activaron involuntariamente varias sirenas.
A tales eventos hay que sumar el ocurrido a finales de agosto en el sector norte de la ciudad, cuando cuatro alarmas emitieron su típico sonido durante una prueba "silenciosa".
A las anteriores se agrega la falla ocurrida ayer.
Demora
Otro dato que es "preocupante", manifestó el académico, es la tardanza de la Onemi en anunciar formalmente el error.
"Informamos que la activación de las sirenas en la Región de Antofagasta no fue producto de una emergencia. Se investigarán las causas", fue el tuit que publicó el organismo 14 minutos después de la activación de las alarmas.
Una hora y media más tarde, el director regional de la institución, Ricardo Munizaga, ofreció un punto de prensa a las afueras de la Onemi.
En ella, la autoridad pidió disculpas a la comunidad y anunció un nuevo sumario administrativo, el segundo en menos de dos meses.
Agregó que a raíz de la investigación, también suspenderán las pruebas diarias a cargo de la empresa Eist.
"Nosotros ahora tenemos que ver la forma y mecánica para que estas pruebas den seguridad a la comunidad. No queremos alarmar innecesariamente, pero estas pruebas las tenemos que hacer", dijo.
Al ser consultado por su permanencia a la cabeza de la Onemi, la autoridad regional descartó una salida y declaró que "no es algo que nosotros tengamos contemplado hasta este minuto".
La alcaldesa Karen Rojo solicitará al director nacional de Onemi, Ricardo Toro, un informe detallado sobre las causas de las fallas en el funcionamiento de las alarmas. "La gente no va a creer cuando suenen las alarmas de tsunami, pensarán que nuevamente es una falla de la Onemi", afirmó.
Contraloría
En enero y febrero de este año, la Contraloría General de la República junto a personal técnico realizaron pruebas silenciosas a las 41 sirenas existentes en el borde costero de la región, determinando que sólo 24 respondieron exitosamente. A continuación, Contraloría efectuó visitas a terreno a una muestra de 11 sirenas seleccionadas, verificando que varias de ellas en efecto estaban fuera de servicio. En respuesta a la instrucción de Contraloría, la Onemi inició una investigación interna para establecer responsabilidad en las fallas detectadas.