La semana pasada se realizó un encuentro empresarial que tuvo por objetivo abordar los desafíos y caminos para fortalecer un compromiso con la integridad y las mejores prácticas en las compañías que operan en Chile.
La cita se enmarcó en los problemas enfrentados por las empresas, las que han visto afectada su imagen, igual que otros estamentos de la sociedad nacional. En lo particular, , los daños a su reputación se ha vinculado con los escándalos por los casos de colusión.
La actividad, denominada "Hacia una Cultura de Integridad Empresarial" fue requerida por la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), que lidera el excanciller Alfredo Moreno, y -debe insistirse- se entiende en el rol que cumplen las empresas en la sociedad, no sólo como proveedoras de trabajo y riqueza, sino también como modelos de conducta de lo que queremos como país.
La jornada, en efecto, finalizó con la suscripción de un compromiso basado en principios éticos y de bien común. La idea es llevar este acuerdo a cada una de las empresas que ellos representan, de manera de avanzar en una cultura de integridad empresarial.
Citas como la mencionada van en el sentido correcto. Las conversaciones, la fijación de estándares y las acciones concretas, son la manera correcta de crear nuevas realidades y así mejorar el tejido social y la extraviada confianza de los chilenos.
Somos un país pequeño y aquí todos somos importantes; ciertamente, debemos ser severos con quienes han cometido ilícitos y eso se ha hecho, las instituciones han funcionado, pero no podemos pretender que la empresa privada desaparezca, como tampoco la clase política, las iglesias, o cualquier institución dañada por actos de una parte menor de sus integrantes.
Chile requiere hablar, mirarse a la cara, observarse, para construir un escenario de futuro, pensando en cómo abordaremos los muchos desafíos que tenemos por delante. Por cierto, debemos aprender de los errores, solucionarlos y sancionarlos cuando corresponda, pero no quedándonos entrampados, sin ser capaces de seguir avanzando.