Los más futboleros aún tienen en la retina aquella entrevista de Alexis Sánchez en un canal nacional en la previa del Mundial Sub 20 de 2007. Con la misma irreverencia que había mostrado en el Municipal de Calama y el Monumental de Colo Colo, el delantero que no cumplía 19 años señalaba que su gran sueño era ser algún día campeón del mundo.
Inmediatamente, los que crecieron en una generación que celebraba los "triunfos morales" en Plaza Italia, o la Plaza Sotomayor en Antofagasta, pensaron que las palabras de este pequeño atacante eran ridículas, hasta utópicas.
Ha pasado una década desde aquellas declaraciones y la generación más ganadora de nuestra historia futbolística nuevamente rompe los esquemas para estar más cerca de una nueva gloria.
Con garra, entrega, buen fútbol y un Claudio Bravo de otro planeta, la selección chilena se impuso ayer en penales ante Portugal de Cristiano Ronaldo en la primera semifinal de la Copa Confederaciones, accediendo en a la final que se disputará el domingo en San Petersburgo.
El bicampeón de América demostró en el Arena Kazán que no era un equipo cualquiera y con poca historia. Por el contrario, se olvidaron de los millones de diferencia entre su plantilla con la de los portugueses, peleándole de igual a igual en un duelo que es para recordarlo siempre.
Pero fueron los europeos quienes tomaron rápidamente las riendas del juego, apretando la salida de los chilenos que no lograban unir el mediocampo con los delanteros, además de aprovechar el veloz contragolpe comandado por la gran figura del Real Madrid.
Pese a esto, Chile se generó oportunidades. La primera fue en el minuto 5, cuando un pase en profundidad de Alexis Sánchez dejó solo a Eduardo Vargas que remató ante la salida del portero, provocando una espectacular contención de Rui Patricio.
La reacción de los lusos no se hizo esperar, un fuerte desborde por la izquierda de Cristiano Ronaldo terminó con un centro a André Silva que venía sólo por el medio, rematando y generando una gran tapada de Claudio Bravo, que ya comenzaba a ser la figura del partido.
Chile logró emparejar rápido las fuerzas, tomando el mediocampo con un incansable Charles Aránguiz que aparecía en todos los rincones de la cancha.
A los 27 minutos, un descuelgue por la derecha de Mauricio Isla termina con el centro que es conectado por el propio "Príncipe", desviando muy cerca del parante derecho de Rui Patricio. Así se fueron al entretiempo con una "Roja" dominado las acciones.
Complemento
Ya en el complemento, los europeos presionaron más y los nacionales comenzaron a sentir el rigor físico, bajando un poco el nivel de juego, pero no así las entrega en el terreno de juego.
A los 58 minutos, otra vez Vargas estuvo muy cerca de abrir el marcado con una volea que fue sacada de manera impresionante por Rui Patricio.
El resto del segundo tiempo fue de aguantar ante las ataques de los portugueses que abusaban de los desbordes de Cristiano Ronaldo. El alargue era una realidad.
En los 15 primeros minutos del tiempo extra, fue donde se vio más agotada a la selección que dirige Juan Antonio Pizzi, resistiendo con Gonzalo Jara y Gary Medel como sus estandartes en defensa.
La polémica del encuentro vendría en el segundo tiempo del alargue.
Francisco Silva había ingresado por un agotado Pedro Pablo Hernández. El "Gato" tomó un balón en el área de los lusos, siendo derribado por uno de los centrales portugueses. Un penal claro que el juez iraní Alireza Faghani simplemente no cobró y tampoco recurrió al criticado VAR, generando la molestia total de la hinchada nacional.
El reloj marcaba 119 minutos, y otra vez el fantasma de Belo Horizonte aparecía. Tras una jugada por la izquierda, Arturo Vidal pegó un derechazo a tres dedo que da en el palo, cuyo rebote quedó en los pies de Martín Rodríguez que no pudo definir con comodidad y el balón da en el travesaño ante la incredulidad de los chilenos, que justo tres años después recordaban el palo de Mauricio Pinilla en el Mundial de Brasil 2014 ante los locales.
Otra vez penales
Con esto no quedó otra opción que definir al primer finalista de la Copa Confederaciones desde los 12 pasos.
Una situación conocida para esta "generación dorada", que ya levantó dos Copas América en penales contra Argentina en ambas oportunidades.
Y ahí apareció la figura del capitán, un Claudio Bravo que llegó con poco fútbol al certamen, pero que demostró porqué es el líder de este grupo.
Para la "Roja" convirtieron Arturo Vidal, Charles Aránguiz y Alexis Sánchez, mientras que Bravo contuvo los tiros a Quaresma, Moutinho y el último a Nani.
La alegría fue total en Kazán, en tanto en las ciudades chilenas se comienza a organizar la gran final del domingo. Hoy se define el otro finalista entre Alemania y México, pero los nacionales ya piensan en escribir otra página gloriosa en San Petersburgo.
ya espera al
"Ejército Rojo"
terminó el partido tras los 180 minutos jugados en el Arena Kazán por las semifinales de la Confederaciones. 0-0
horas del domingo se jugará la final de la Confederaciones 2017 en San Petersburgo. 14
penales tapó el arquero de la selección chilena, Claudio Bravo, en la definición ante Portugal. 3