Cristian Castro O.
Cristian Riquelme llegó a vivir hace pocos días a Antofagasta. Es de Iquique, ciudad donde destinaba unos $25 mil para su alimentación diaria, ya que es un asiduo de los gimnasios. En lo que lleva en Antofagasta y comprando los mismos productos, esa cifra aumentó a $40 mil.
"Cuando te ejercitas es necesario tener una alimentación alta en proteínas y calorías a la que agregas suplementos. Por ello invierto mucho en comida, pero aquí, desde los suplementos hasta las verduras son considerablemente caros", dijo.
Diferencias
Para considerar, una alimentación completa y balanceada (recomendada por nutriólogos y el Ministerio de Salud) debe ser rica en verduras, frutas, lácteos, granos y carnes.
Sólo en frutas y verduras, el precio medio de la palta Hass puede superar los mil pesos por unidad, y en supermercados, el kilo llega a $2 mil pesos. Valores que contrastan con los $600 en promedio que sale el mismo producto por unidad en el resto del país, según el último boletín de precios mayoristas del Ministerio de Agricultura.
El precio de los huevos por unidad en almacenes y negocios de barrio va de los $200 a $250. En tanto, el pan integral, $1800, el kilo de naranja alcanza los $2.000. Ya sólo contemplando un desayuno sano, con jugo de naranja natural incluido, en Antofagasta sale más de $3.000.
También el progresivo aumento del valor de los productos naturales -como la quinoa, que por kilo puede valer hasta $3 mil pesos en los supermercados- viene a dificultar las alternativas para aquellos antofagastinos que prefieren optar por una vida más sana.
A ello, productos descremados, bajos en azúcar, sin gluten, bajo en sodio, cereales integrales y todo lo no endulzado ni procesado, vitaminizado y natural, suele tener un costo superior a sus equivalentes "poco sanos" (ver recuadro).
"Sacando la cuenta, si comes como recomiendan los nutriólogos o médicos, en 15 días te gastas el presupuesto en alimentos que consideras para el mes", asegura John Alejandro, antofagastino que prefiere alternativas menos onerosas.
Expertos
La directora de Nutrición y Dietética de la Universidad Santo Tomás (UST), Ximena Alegría, manifestó que si bien los precios son más altos en la zona, siempre hay alternativas para alimentarse a bajo costo.
"Uno debe volver a las elaboraciones antiguas como los guisos con muchas verduras, pescados y carnes, evitando alimentos procesados. Ahora bien, aquí es caro, todos lo saben, y más si consideras que hay una familia que debes alimentar, sale un poco caro. Pero hay gente que está elaborando sus propios huertos. Además siempre hay ofertas de estos alimentos", dijo la profesional.
Asimismo, María Paz Rosales, nutrióloga de Clínica Bupa Antofagasta, dice que el tema es algo complejo debido al auge de las dietas saludables.
"Hay más interés por las comidas sanas debido al aumento de las patologías asociadas a la mala alimentación. Lamentablemente en esta región las frutas y verduras, que son indispensables en una buena dieta son más caras que en otras zonas", aseguró.
Recomendó invertir aquello presupuestado en gaseosas y alimentos 'chatarra' en comida sana para mitigar el efecto de su alto valor.
Supermercados
Los cereales azucarados cuestan en promedio $2.000, mientras que los integrales $3.500. La leche entera en polvo (1 lt) llega a $1.879; la leche descremada, $2.619; avena normal (1 kl), $1.500; avena sin gluten ni endulzatnes ni sodio, $6.399; sal normal (1 kl), $366 ;y la sal de mar (con menos sodio), $1.099.
Ximena, Alegría,, directora, Nutrición UST"
"Si la gente destinara lo que gasta en el patio de comidas, no nos parecerían tan alto el valor de frutas y verduras".
María Paz, Rosales,, nutricionista
Clínica Bupa"
"A veces la gente prefiere productos enlatados para mitigar el precio de las carnes, pero no tienen la misma calidad"."