Antonella Casali Allende
Termina febrero y con ello las vacaciones para muchos antofagastinos, sin embargo, eso no necesariamente garantiza el fin de las altas temperaturas en la zona.
Todo lo contrario. Expertos advirtieron que olas de calor, como las que vienen afectando a Antofagasta y otras ciudades del norte, podrían repetirse durante el otoño, debido a las particulares condiciones del mar (alta temperatura de la masa oceánica) y la presencia de un fenómeno llamado "núcleo frío en altura".
Este fenómeno, también conocido como "baja segregada", se caracteriza por trasladar aire húmedo desde zonas tropicales, además de tener movimientos ascendentes que hacen circular el aire hasta lo más alto de la atmósfera.
La presencia de uno de estos núcleos hizo que el pasado 21 de enero la ciudad registrara una máxima de 30,3 grados a las 11.57 de la mañana, lo que constituye más alta desde 1998, cuando el termómetro marcó 31,8 grados.
El fenómeno climático nuevamente se hizo presente el domingo y ayer, con temperaturas de 28 y 27 grados, respectivamente, y posibilidades de que se extienda hasta el jueves, según Meteorología, con registros cercanos a 30 grados.
Expertos
Desde el Centro de Medición Atmosférica de Cerro Moreno, la especialista Alejandra Calderón explicó que las condiciones climáticas están sujetas a diferentes factores.
Comentó que durante todo el verano, la temperatura promedio del mar estuvo aumentando, lo que produjo mayor evaporación y con ello más humedad en el ambiente.
Otro factor importante habría sido la "Alta de Bolivia", que hace que aumente el calor y la humedad que proviene desde la selva amazónica.
Sin embargo, la especialista aseguró que el principal factor que explica la repentina alta de temperaturas es el "núcleo frío", que traslada viento desde zonas tropicales.
El meteorólogo del Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas (Ceaza), Luis Muñoz, explicó que este núcleo "limpia" las nubes costeras y la humedad típica de la vaguada costera, que caracteriza a esta zona del país.
"Al estar limpia la atmósfera, la radiación solar llega con mayor intensidad a la superficie, permitiendo que se registren mayores temperaturas", informó el experto.
Muñoz confirmó que si bien las olas de calor son una situación puntual, pueden seguirse presentando dada la anomalía que se registra en el océano, frente a la costa del país, y que provoca que las temperaturas del aire sean más altas de los normal.
Lluvias
El especialista dijo que este núcleo frío también produce cambios en las condiciones climáticas, no sólo relacionadas con altas temperaturas y aumento de humedad en el ambiente, sino también "acompañados de chubascos y tormentas, tal como ocurrió en marzo del 2015".
Esta opinión es compartida por Alejandra Calderón, del Centro de Medición Atmosférica de Cerro Moreno, quien detalló que los factores que inciden en las cálidas temperaturas seguirán manifestándose en el borde costero local.
"No se puede descartar que vuelva a ocurrir (una ola de calor), porque la temperatura del mar no es algo que vaya a descender de aquí a un par de días, y ese ya es un factor potente. A esto se suma que marzo es un mes de transición por el cambio de estación, y en estos periodos suelen registrarse núcleos fríos", dijo.
En cuanto a las temperaturas que se alcanzarán durante el año, la experta manifestó que en 2017 pueden presentarse situaciones alejadas de las condiciones habituales de la zona norte.
"Estamos claros que el clima ya no es el mismo que hace unos años y se ha vuelto común que al menos una vez al año exista un registro de precipitaciones en la zona. Y ésta es una condición que se verá nuevamente en el periodo de invierno", sostuvo.
Lo último del verano
Pese a la llegada de marzo y con ello el regreso a clases y la rutina laboral, la ola de calor hizo que los antofagastinos siguieron acudiendo a las playas y balnearios de la ciudad. Es así como cientos de personas se dieron cita el fin de semana en el sector costero, situación que se repitió ayer, aunque en menor medida. El público aumenta desde las 17 horas.