Un importante paso adelante dio el municipio en su objetivo de modificar el decreto que prohíbe la bajada de camiones por Salar del Carmen y Salvador Allende, medida indispensable para evitar un encarecimiento de costos cuando entre en operaciones el relleno sanitario Chaqueta Blanca.
Hace pocos días las trece juntas de vecinos situadas en el área de influencia del proyecto, dieron su visto bueno al uso de este acceso por parte de los camiones recolectores que trasladarán la basura al nuevo depósito, el que según los últimos anuncios, comenzará a operar en marzo.
Hay que recordar que la bajada de camiones por Salar del Carmen (Ruta 26) y Salvador Allende está prohibida desde 2008 debido a los frecuentes accidentes que se producían en este acceso a la ciudad.
Tal restricción amenaza con afectar la operatividad del futuro relleno sanitario, puesto que los camiones de basura, no podrían emplear este eje en su retorno a la ciudad, teniendo que recurrir como alternativa a la Ruta 5 y la B-400, para luego entrar desde el norte por la Ruta 1, lo que extendería en 82 kilómetros cada trayecto.
Conscientes de eso, durante los últimos seis meses la municipalidad ha mantenido conversaciones con el Ministerio de Transportes y con los representantes de las juntas de vecinos para convencerlos de la necesidad de establecer una excepción en el decreto para los camiones recolectores.
Tales gestiones finalmente llegaron a buen puerto, pues los vecinos autorizaron que los camiones de basura puedan bajar.
Medidas
La presidenta del sector Salitre Alto, María Rivera, explicó que el acuerdo fue posible gracias a que la municipalidad accedió a incorporar las exigencias de los pobladores para hacer seguros tales desplazamientos.
"Nosotros queríamos una garita para controlar a los camiones, en la Cachimba del Agua, y la van a instalar. Pedimos GPS para los vehículos, que son máquinas nuevas, que bajarán de ocho a cuatro (8 a 16 horas), o sea hay todo un plan de acción", destacó.
La dirigente explicó que la primera propuesta hecha por la municipalidad no los dejó contentos, sin embargo, lentamente se fueron aproximando a un acuerdo. "El temor siempre estará, porque son camiones, pero si cumplen, no tendría que pasar nada", enfatizó.
Circuito
El plan del municipio es que los camiones -que bajarán vacíos- usen como circuito la Ruta 26, Salvador Allende y Óscar Bonilla, si van al norte; y Ruta 26, Salvador Allende y Circunvalación, hacia el sur.
Este antecedente también fue sopesado por los vecinos, pues en el fondo sólo emplearán el tramo superior de Salvador Allende y no la avenida en toda su extensión.
El seremi de Transportes, Waldo Valderrama, afirmó que para la cartera la opinión de los dirigentes es determinante en la respuesta que entreguen a la petición municipal, por eso el acuerdo destraba enormemente una solución.
Valderrama detalló que una vez que los vecinos oficialicen su decisión ante el ministerio, sólo restará resolver algunos "detalles técnicos" para dictar una excepción al decreto que rige desde 2008.
En relación a los reparos que previamente realizaron varios entes técnicos -entre ellos la Siat de Carabineros-, el seremi manifestó que los informes entregados plantean observaciones que ahora estarían quedando resueltas. "Creemos que con la implementación de las medidas adecuadas, puede hacerse una bajada de camiones segura, en este caso en particular", manifestó.
El personero descartó la posibilidad de la derogación total del decreto para permitir que todo tipo de camiones use Salvador Allende, y advirtió que para las demás máquinas se mantendrá la prohibición de ingreso y se seguirán cursando partes a través del sistema de cámaras automáticas recientemente inaugurado.
Enlace
Tras el acuerdo con los vecinos, la preocupación del municipio se trasladará a lograr que la Unidad de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas apruebe el diseño para el enlace entre la Ruta 26 y el camino de acceso a Chaqueta Blanca, que sigue pendiente.
Esa gestión resulta urgente en consideración a que el relleno sanitario concluirá su construcción a fines de febrero y sin tales obras no podría comenzar a recibir desechos en marzo.
Garita controlará ingreso de máquinas
La principal medida de seguridad que se implementará será la instalación de una garita y un área de descanso donde los camiones de basura que descienden, deberán detenerse por media hora para que su sistema de frenos se enfríe, lo contribuiría a evitar una de las fallas que más se repitió en los anteriores accidentes. Las máquinas además tendrán velocidades límite controladas por GPS y se habilitará una plataforma virtual, "tipo WhatsApp", donde participarán Carabineros, Transportes, el municipio y el supervisor del contrato.