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Sólo recién después de tres días de angustia, llanto y dolor, Jenny Martínez pudo sentarse a tomar desayuno. No podía comer nada, apenas soportó una sopa el martes. En el comedor de su casa en Mejillones trata de reconstruir los hechos, pensar en lo que ocurrió.
Ahora tiene más serenidad y saca fuerzas de flaqueza para enfrentar el largo proceso que viene por delante.
Sólo piensa en la recuperación de su hija mayor, Dyana Laffite, que permanece en grave estado internada en la UCI del Hospital Regional de Antofagasta, luego que el domingo fuera quemada por una pareja de desconocidos que ingresaron a su casa y le lanzaron un líquido para después prenderle fuego.
"Tengo fe y confío en Cristo que mi hija va a salir adelante y recuperarse. En eso me tengo que desgastar, en que ella salga adelante. Estoy rezando a mi Dios y se que ella está luchando por su vida, eso lo sé, lo siento", confidenció.
Ataque
El domingo pasado, cerca de las 13 horas, unos desconocidos (mujer y hombre) entraron a la vivienda donde vive la familia Laffite Martínez, en el pasaje Casimiro Olmos a la altura del 1.000, en dicha comuna.
En el segundo piso del inmueble se encontraba Dyana, que había cumplido turno en su trabajo en una de las tantas empresas del megapuerto.
Pensaba salir a almorzar con su pareja, sin embargo, sorpresivamente en la puerta del segundo piso aparecieron los desconocidos, que le preguntaron acerca de una mujer.
La joven madre les contestó que ella no era a quién buscaban, pero no entendieron, no razonaron.
"Escuché entre sueño que algo pasaba arriba de mi casa. Sentí ruidos y gritos, pero sólo a los minutos después supe lo que pasaba. Mi hija había sido atacada y estaba quemada", comentó su madre angustiada.
Según algunos testigos que escucharon los gritos de la joven, todo ocurrió en escasos minutos. La pareja de Dyana estaba al interior de la vivienda y cuando escuchó los gritos salió a auxiliarla. Atinó a socorrerla al tiempo que los atacantes huían.
Llevó a la joven hasta la ducha porque no podía apagar las llamas que la envolvían. Así estuvieron algunos minutos hasta que llamaron a la ambulancia y a Carabineros.
Estudios
Dyana Catherine es una esforzada madre de 29 años, que trabaja como administrativa en una empresa de la comuna. Cumple turnos y además de ellos viaja a Antofagasta para asistir a clases al instituto AIEP.
Una de sus hermanas comentó que ella siempre ha tenido metas y espíritu de superación.
Por lo mismo está estudiando Administración de Empresas con mención en Recursos Humanos. En la medida que sus turnos se lo permiten hace el sacrificio de viajar dos horas diarias para capacitarse. Su anhelo como el de todas las madres, es darle un mejor futuro a su hija, que pronto cumplirá 13 años.
Afortunadamente la menor no se encontraba en el domicilio cuando ocurrió el salvaje ataque.
"La gente que vino estaba decidida a todo. Cuando prendieron fuego a mi hija incluso sacaron el gas, lo movieron, con la clara intención de quemar la casa", precisó la madre de Dyana.
Impacto
Todo Mejillones está impactado por los hechos, especialmente porque todo indica que fue un ataque erróneo y sin lógica alguna, un acto demencial. Hace más de 30 años que la familia está avecindada en ese barrio, y jamás han tenido un problema.
Jenny Martínez se siente orgullosa de sus tres hijas porque son luchadoras al igual que ella, y confía en que como familia podrán salir adelante.
Agradeció el apoyo que han recibido de mucha gente, autoridades, amigos y familiares que están presentes en este difícil momento.
La Brigada de Homicidios, a cargo de su jefe Herwin Rojas, están haciendo una minuciosa investigación a fin de esclarecer los hechos e identificar a quienes cometieron el brutal ataque.
Los especialistas del Hospital Regional que la están tratando, están evaluando la posibilidad de trasladarla a Santiago, pero esa alternativa será viable sólo en la medida que se encuentre estable.