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Jóvenes mueven la región con ambiciosos proyectos sociales

EMPRENDEDORES. La innovación y el compromiso por la comunidad son el motor de estos grupos que buscan el progreso y el desarrollo de su ciudad, en base a ideas sustentables en el tiempo.
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Redacción

En la costa de Antofagasta, un grupo de jóvenes enseña a niños en riesgo social el arte de dominar las olas sobre tablas de bodyboard. Más al sur, estudiantes se pasean por la playa recogiendo basuras y escombros.

Mientras en San Pedro de Atacama, vecinos Likan Antai (pueblos originarios de la precordillera) se unen para mejorar su entorno y calidad de vida, incorporando energías renovables.

Estas son algunas de las ideas que jóvenes, dirigentes y vecinos de la región impulsan a través de una serie de programas y talleres de emprendimiento para fomentar el atractivo turístico de su comuna, mejorar la calidad de vida y, también, consolidar su compromiso social.

Taller de Innovación

Prueba de este fenómeno fueron las más de 70 personas que logró reunir el Primer Taller "Innovación Social: Consolidación de Núcleos MultiHélices", que fue convocado por la Universidad Católica del Norte como parte del Lanzamiento del proyecto que ejecutan con el Fondo de Innovación para la Competitividad Regional.

El director de este Proyecto FIC, Emilio Ricci, explicó que el espacio fue una instancia para poder hacer converger iniciativas multisectoriales en donde la academia, el emprendedor, las instituciones públicas y la comunidad crean y plantean soluciones conjuntas a temas de desarrollo regional y se presentan como potenciales núcleos de innovación.

"No existe innovación sin profundas transformaciones que impacten a la comunidad. La innovación social debe construirse sobre la participación de los agentes locales, el empoderamiento y el compromiso ciudadano hacia respuestas naturales que les permita resolver sus necesidades", destacó Ricci.

Propuestas

Recordemos que la innovación social se reconoce como un ámbito en auge a nivel mundial por su grado de efectividad en torno a resolver problemas sociales justo en momento en el que se necesita de nuevos enfoques y caminos para hacer frente a los actuales retos que pueda enfrentar una comunidad.

En este aspecto, no son pocos los jóvenes en Antofagasta agrupados en torno a organizaciones y colectividades para impulsar una serie de mejoras que vayan de la mano también con el progreso de sus comunidades.

Tal es el caso del Club Budeo de Antofagasta, que ya tiene tiempo dedicando un área de su escuela a la capacitación de niños en riesgo social, con el propósito de mejorar su destreza en el bodyboard, inculcando además valores (como el cuidado por el medio ambiente y el desarrollo artístico) entre sus alumnos.

También, en la ciudad, un grupo de jóvenes universitarios unidos por su compromiso con la ecología, dieron vida a Colibrí Eco-Social, una organización que prioriza la ejecución de operativos de limpieza en distintos sectores de la comuna.

"Nuestro objetivo es poder hacer de esta ciudad un lugar sustentable y más amable con el medio ambiente, por lo cual nos dedicamos principalmente a realizar operativos de limpieza en diferentes sectores de la ciudad, implementando a la vez talleres de capacitación para que las personas aprendan a reciclar y adquieran mayor conocimientos en esta área", dice Ada Calderón, vocera de la organización.

Por su parte, el estudiante Camilo Kong Pineda, quien lidera 'Antofapatrimonial', enfocada en el rescate cultural e histórico de la ciudad, manifiesta que "nuestro objetivo es que las personas comiencen a interesarse en todos los aspectos culturales de la comuna, por lo cual es importante fomentar en ellos el atractivo que tiene nuestro entorno", manifestó. Y así cada día, jóvenes, líderes y vecinos emprenden un nuevo proyecto para el progreso de sus comunidades.

"Quienes no desarrollan ideas colaborativas que consideren el bienestar social, no hacen innovación social, hacen emprendimiento".

Emilio Ricci,, Director proyecto 'Triple Hélice'"

Caleta Constitución usará energía solar para desalar agua

COMUNA. Pescadores tendrán huerto comunitario en el desierto costero.
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El uso de energía solar fotovoltaica para desalar agua de mar y la implementación de un huerto comunitario, convirtieron a Caleta Constitución, en la Región de Antofagasta, en la primera comunidad energéticamente sustentable del desierto costero del norte de Chile.

Estos avances fueron el resultado de un proyecto de transferencia tecnológica ejecutado por la Universidad Católica del Norte (UCN) y financiado por el Gobierno Regional de Antofagasta a través del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC-R).

La iniciativa permitió mejorar el abastecimiento energético e hídrico a esa comunidad, compuesta por unas 70 familias de pescadores y que se ubica frente a la Isla Santa María, en la Península de Mejillones.

Se trata de un proyecto piloto que espera ser replicada en otras caletas costeras del norte del país, para satisfacer el abastecimiento energético e hídrico, requerimientos fundamentales en dichos poblados.

En Caleta Constitución, un campo solar fotovoltaico compuesto por 30 paneles entrega la energía eléctrica suficiente para poner en funcionamiento una planta de osmosis inversa que aporta a la comunidad una producción de 1.000 litros de agua desalada por día.

Para su realización, este proyecto contempló tres fases. La primera etapa consideró la instalación y montaje del campo fotovoltaico, integrado arquitectónicamente a la cubierta de la pérgola existente, aprovechando la energía renovable solar para el funcionamiento de la planta desaladora y el suministro eléctrico de la escuela, proporcionando iluminación y energía para los equipos computacionales y electrodomésticos.

Planta

La segunda fase contempló la instalación de la bomba y la planta de osmosis inversa para la producción de agua desalada.

Finalmente, la tercera etapa consideró la construcción de un huerto comunitario que aprovecha el agua de rechazo y la experiencia local en el cultivo de hortalizas para el consumo doméstico.

Tras una capacitación, todas las instalaciones serán operadas por los propios pobladores, los que para este fin se han constituido en un Comité de Agua. Con ello, se espera el mejoramiento de su calidad de vida, con beneficios directos para la comunidad.