Eugenio Sugg Gálvez
Pese a que su ubicación definitiva aún está en estudio, Aguas Antofagasta confirmó la construcción de una segunda desaladora de agua de mar para la capital regional. Según explicó el gerente general de la sanitaria, Fredy Zuleta, la planta estará operativa en 2020 y con ésta la ciudad quedará abastecida en un 100% con esta tecnología.
Efectivamente, a un año de que el grupo colombiano Empresas Públicas de Medellín (EPM) tomara el control de Aguas Antofagasta, la etapa de diagnóstico estipulada por la compañía está finalizada. En esa línea, Zuleta afirmó que uno de los desafíos es lograr que la compañía sea más cercana a la comunidad.
"Eso es parte del mandato que EPM tiene como grupo, reconocemos nuestro rol de empresa estratégica y nuestro compromiso con el desarrollo sostenible de las zonas donde operamos. Estimamos que hay una deuda histórica de la empresa con la región", dijo.
En esa línea, el ejecutivo valoró los avances que han logrado en estos primeros meses de operación. "Logramos reducir los pendientes de pavimentos por obras que sólo en Antofagasta superaban los 1.600, hoy tenemos menos de 30. Lo mismo con los escombros que se producen estos trabajos, los que estamos retirando antes de 24 horas", dijo.
Los números de la nueva administración indican que la frecuencia de roturas en la red es muy baja, del orden de 12 por cada 100 kilómetros de red. "Sin embargo, cada rotura afecta a mucha gente, en promedio a 1.000 personas y eso es porque los distritos son muy grandes", explica.
Por tal razón adelantó que la compañía impulsará un plan de inversiones en válvulas a 24 meses que acortarán esos distritos para que así cada corte afecte a muchas menos personas. "Queremos bajar ese número en el corto plazo al menos al promedio nacional que es de 250 personas, para lo cual invertiremos unos $1.000 millones anuales", explicó.
Desaladora
Esa inversión en el sistema de válvulas se materializará en el marco de un plan de inversiones -que ya comenzó este año que considera la ejecución de $38.000 millones anuales a 2020.
Un 20% ($12.000 millones) de ese monto está destinado a la ampliación de la actual planta desaladora, proyecto que estará operativo durante la primera quincena de septiembre y que la dejará con una capacidad de 850 litros por segundo y permitirá abastecer al 80% de la ciudad con agua de mar tratada.
"Asimismo, invertiremos unos $3.000 millones anuales en reposición de redes, eso considera estanques y cambios de medidores", explicó Zuleta.
Respecto de la segunda planta anunciada para la ciudad, Zuleta confirmó que el plan de inversiones de la sanitaria la tiene considerada para 2020 en operación. "El tamaño de la planta lo estamos evaluando, en principio sería por el restante 20% que requiere la ciudad (200 litros por segundo), pero eso puede sufrir una pequeña variación", explica.
Sobre el lugar donde se emplazará, el ejecutivo aseguró que estudian una ubicación en el sector sur de la ciudad -distinto al identificado originalmente- y también la opción de construirla junto a la actual planta en la zona norte.