"Yo llamé a Vergara para ver si podía venir al CDA"
Pese a que no tiene una larga trayectoria en partidos de Primera División, el "Coloro", como lo conocen en el ambiente futbolístico nacional, viene a Club de Deportes Antofagasta con la ilusión de ganar experiencia y así hacerse un nombre en el balompié criollo.
Y es que Christopher Ross (22), oriundo de Puerto Montt, está seguro que su velocidad y su juego polifuncional, pueden ser decisivos y aportar al plan que el estratega Fernando Vergara, con quien ya compartió durante su periodo en la Unión Española en 2014-2015, tiene para los "Pumas" en esta nueva temporada.
¿Cómo fue su paso por Unión Española?
-Fue bueno. Un club que me hizo debutar profesionalmente. Me sirvió mucho para obtener un bagaje futbolístico, gracias al cual pude llegar acá. Sino hubiese tenido esa experiencia, creo que no habría llegado al CDA.
Tuve muy buenos referentes allá. Tuve la suerte de tener buenos guías, como el Milo Larenas, Gonzalo Villagra, que me lo vuelvo a encontrar acá, Juan Carlos Ferreira y el Nico Berardo quienes siempre me aportaron muchísimo. Fueron mis mentores en los primeros años.
¿Qué le lleva entonces a venir al CDA?
-Fueron una mezcla de situaciones. Por un lado, estando en Unión el DT Martín (Palermo), me dijo que este año iba a tener pocas chances de jugar en cancha. Eso, a pesar de que agradecí la honestidad, originó mis ganas de irme ya que no quería estar sin jugar.
¿Qué le parece que haya sido el propio Vergara quien lo llamó para pertenecer a los "Pumas"?
-A ver. Hubo un interés mutuo. Por parte de él de que yo viniera y por mi parte de poder venir, pero yo fui quién lo llamó una vez quise irme de Unión Española para ver si podía llegar al CDA. El conocía mis habilidades. Si me decía que no, jamás hubiese podido venir.
¿Cuáles son esas habilidades?
-Lo primero es que para mi altura (1.80 mts.), soy un jugador muy rápido. También soy bueno en la posición de lateral zurdo, que es una de las posiciones donde hay pocos chilenos y más extranjeros. Pero bueno, independiente de la fase en la que me ocupe el profe, sea central, lateral o un stopper izquierdo, o linea de tres, iré ahí. Quizás sea mí polifuncionalidad lo que vengo a aportar.
Sacrificio
Para el puertomontino, el estar lejos de su familia es parte del trabajo que cualquier jugador que quiera hacer carrera en el fútbol profesional debe tener presente. Eso sí -dice- al estar a 2.396 km de su tierra natal, "se comienza a echar de menos".
¿Es la primera vez que está tan lejos de su casa?
-Sí. Antes sólo llegué a Santiago para ser parte de Universidad Católica a los 15 años y Unión Española a los 20. No obstante, pienso que esto no es un sacrificio, ya que estoy haciendo lo que me gusta. Cualquier futbolista debe entender esto si quiere profesionalizarse.
¿Qué dice su familia al respecto?
-Ellos me apoyan al 100%. Mi mamá es la que más sufre por el hecho de estar tan lejos, pero saben, yo les dije, que vine a buscar mi felicidad al equipo de Antofagasta y que es aquí donde pretendo hacer carrera.
¿Cree que pueda encontrar esa felicidad aquí?
-Vengo a buscarla, pero ya estando en un lugar así, con este grupo, yo estoy muy feliz y no tengo nada que decir. A varios de los jugadores los conocía de antes, pero a los que no (Delfino y Dituro) me recibieron muy bien. Estoy cómodo.
"Es mí polifuncionalidad lo que vengo a aportar. Soy un jugador rápido y bueno de lateral zurdo. Puedo jugar en cualquier fase de la defensa".