Redacción
"Ha pasado casi un año y nos decepciona que la justicia no nos dé una respuesta. Cómo es posible que no haya una solución, es algo difícil de entender", confidenció Alejandro Mori, hermano de Sergio, el taxista que el 3 de agosto del año pasado, fue encontrado muerto al interior del maletero del auto que manejaba.
El dramático hallazgo se realizó en el costado norte del balneario "El Trocadero". El cuerpo del taxista Sergio Mori Olcay (33) presentaba lesiones mortales en la cabeza y otras lesiones menores de autodefensa.
El asesinato del conductor, que hacía servicios hacia el aeropuerto tiene que haber ocurrido pasadas las dos de la madrugada. Su familia sostuvo que quince minutos antes recibió un llamado. Al salir de su casa dijo que regresaría pronto. Esa madrugada (lunes 3 de agosto) fue la última vez que lo vieron.
Su familia quedó devastada, y siempre han tenido la sensación que se trató de un crimen por encargo. Alejandro, su hermano, quien ha tenido que tener gran fortaleza para poder contener a la familia, y en especial a su madre, dijo que al cumplirse un año de la brutal muerte de Sergio, siguen esperando que la justicia encuentre a los culpables.
También mostró su inquietud porque con sus sobrinas que actualmente tienen 7 y 11 años, hijas de Sergio, no han podido tener ningún contacto.
"Al poco tiempo del crimen, la pareja que tenía mi hermano se fue con las niñas a Iquique. Intentamos ubicarlas y se cambiaban de domicilio. Ahora ya no están allá, y continuamos la búsqueda", comentó afectado.
Además del dolor por la trágica muerte de su hermano, deben lidiar con la desaparición de las pequeñas.
Consultado respecto del curso de la investigación, el fiscal regional Alberto Ayala dijo que en su momento sostuvo una reunión con los fiscales Ana María Escobar, Juan Castro y la Brigada de Homicidios.
"Se trata de un caso complejo que escapa del común modus operandi. Estamos trabajando en una línea investigativa que guarda relación con las personas más cercanas de la víctima", explicó.
Misa
Ayala agregó que como Ministerio Público tienen que agotar todos los medios posibles para esclarecer los casos y darles tranquilidad a las familias.
Al cumplirse un año del crimen, el sábado 6 de agosto, a las 20 horas, su familia realizará una misa en el lugar donde fue encontrado Sergio.
Amigos y vecinos del taxista se reunirán para recordarlo y hacer fuerzas porque el caso no quede en el olvido.
"Será porque somos una familia de clase media que todavía no tenemos una respuesta. El fiscal nos dijo que el caso seguirá abierto, y por eso sólo nos queda esperar para que se haga justicia", acotó el hermano del taxista asesinado.