Dublé Urrutia y el Mar
Si el ambiente portuario y mercantil de las costas chilenas tiene múltiples expresiones, en nuestra literatura, la vida y el ambiente de los pescadores, su heroica y difícil faena, posee un autor que ya se ha hecho clásico: Diego Dublé Urrutia.
Dublé nació en Angol en 1877, proveniente de una antigua familia de militares que en su mayoría devinieron en agricultores, como el propio poeta, cuñado de Vicente Huidobro. En su juventud fue ardiente defensor de posiciones políticas populares y ateas llegando a ser dirigente nacional del partido Radical. Posteriormente se convirtió al catolicismo y sus últimos poemas son de franca tendencia mística, escritos en Italia, país donde residió largo tiempo cumpliendo funciones diplomáticas. Fue Premio Nacional de Literatura (1958)
La procesión de San Pedro y Bendición del Mar, es un extenso poema. Su primer canto es "Por las calles: La mar está de gala; por hoy el viento se ha metido en los mares, galantemente, y en los muelles y ranflas (declive), que es un contento, como furel varado brilla la gente". La parte II es "En el mar: Todo en la mar es fiesta, todo clamores, todo música, trajes, mozas, galanes, disparos y banderas y voladores… Y desde la ribera mira la gente…" Como época de época, finaliza con un "Epílogo: Baja por las gargantas el agua ardiente y hasta en los camarotes de algún navío gozan, su pipa el viejo, su ron el mozo, solo el Señor San Pedro tiembla de frío".
Toda la aventura humana de las pesquerías, el ambiente íntimo de las caletas, las costumbres del alma costina, están reflejadas, con todo su colorido en su poema satírico "Procesión de San Pedro", escrito presumiblemente el 29 de junio de 1901. El extenso poema, de carácter narrativo como la mayoría de las piezas líricas de su tiempo, pinceladas costumbristas, las alternativas de la conocida fiesta religiosa de los pescadores, el paseo de San Pedro en alta mar, con la concurrencia entusiasta de los caleteros de San Vicente, Penco…
NdeR. Dublé Urrutia nació el 08 de julio de 1877. Este es nuestro homenaje.
Mario Ferrero