Candidatos
Jubilación
Es interesante recordar las declaraciones del diputado Andrade y exministro del Trabajo en 2015: "Hay que establecer un piso único de pensión, que tenga una cierta cercanía con el salario mínimo, que esté garantizado para todos los trabajadores que hayan cumplido 20 años de cotización". Luego al conocer la suculenta pensión de su esposa, queda sin ninguna duda probado su objetivo de 2015, al superar muy ampliamente el piso equivalente al valor del sueldo mínimo vigente.
Alcaldes I
Alcaldes II
Si bien hace un tiempo destaqué la correcta presencia de los choferes de los taxibuses con su uniforme y corbata, ahora debo decir que la vestimenta de algunos deja mucho que desear. Para tenerlo en cuenta.
Margarita Prieto
He escuchado tanto sobre la alcaldesa, sobre su personalidad, ética, moral, inestabilidad, juicio, criterio, decisiones, etc., que se me ocurre que para la sanidad de nosotros y futuro de nuestra ciudad, que dicho de paso, tiene todo para ser grande y próspera, debiéramos exigir que los candidatos a alcalde fueran examinados por un sicólogo o bien, medir su capacidad mental, emocional y racional. Creo necesario entreguen un parte médico como "aptos" para el cargo.
No me cabe en la cabeza que el señor Adaro, tan cuestionado (aquí y allá), pretenda ser candidato si fue desvinculado legalmente por cosas raras, del mismo cargo.
Que el señor Rojas, después de ser diputado, ahora quiera ser alcalde, no sería mejor dejar a personas con menor edad incursionar también en estas tareas.
La señorita Merino, con apenas 3.000 y tantos votos pretenda ser elegida. El señor Araya, igual, si tiene algo raro con SQM, lo que hace dudar de su honorabilidad. A los demás candidatos ni mencionarlos.
Me quedaría con Ricardo Díaz, profesor, independiente, recién incursionando en política, sin cuestionamientos, pero con la duda si tiene la preparación adecuada.
Quiero terminar diciendo que no estamos cansados de la política, lo que nos pasa es que estamos cansados de los políticos.
Felipe Elgueta E.
Al hacerse pública la pensión millonaria de Myriam Olate, esposa del diputado Osvaldo Andrade (PS), actual presidente de la Cámara de Diputados, tras 21 años de trabajar en Gendarmería y recibir $5.200.000 mensuales, para que un chileno pudiera tener dicho monto de pensión, debería haber acumulado fondos por más de $1.400 millones en toda su vida laboral (algo así como US$2 millones).
Luis Enrique Soler Milla
He llegado a la conclusión que la pretensión económica de la poco seria Asociación de Municipalidades, obedece a una política chantajista de alcaldes que buscan mostrar un protagonismo que los favorezca en las próximas elecciones.
Llama la atención además que los alcaldes pidan con -supina ignorancia- recursos del cobre que pertenecen sin distinción a todos los chilenos, de Arica a Magallanes.
Chile es el productor del cobre y no Antofagasta, de modo que la Presidenta de la República se obliga a distribuir racionalmente los recursos en todas las regiones del país, sin crear comunas regalonas de ninguna naturaleza ni especie.
El anuncio de paralización de los alcaldes no pasa de ser un circo comunicacional que deja al descubierto la incultura política que poseen, siendo la alcaldesa de esta ciudad el caso más patético de desmerecimiento.
De hecho, todos piden, pero todos son pasivos, pues nadie entrega ideas ni argumentos consistentes.
Lino Monroy Escalona
La Asociación de Alcaldes parece ser más un grupo de escolares revoltosos que líderes con mentalidad positiva que sepan interpretar las políticas de estado que están orientadas a resguardar, sin distinciones, las necesidades de todas las regiones y de todos los chilenos.
Ningún estado del mundo está dispuesto a avalar sectores privilegiados dentro de una misma nación, de manera tal que la solicitud de los alcaldes de contar con participación exclusiva en los impuestos de la minera, es una soberana barbaridad chilensis de alcaldes que no tienen la amplia visión requerida.
Por tratarse además de una solicitud antidemocrática que apuesta a la desigualdad entre chilenos, la Presidenta está obligada a entregarles un rotundo "NO" a los patuditos peticionarios.
Edgar Arismendi Santiago