Redacción
Dos impactos de bala, uno en la cabeza y otro en el pómulo, son los nuevos antecedentes que se suman a la investigación que se realiza para esclarecer la muerte de Freddy Orellana Pérez, quien fue encontrado esposado, encadenado, fracturado e incinerado en una cueva del sector Ojo de Opache, en Calama. Las heridas habrían sido provocadas por un revólver calibre 38.
Este dato trascendió luego que fuentes que realizan las diligencias conocieran los primeros antecedentes que emanan de la necropsia que se efectuó al cuerpo de este calameño de 39 años, quien fuera padre de dos pequeñas niñas.
Incógnitas
Esta información corroboraría, en parte, la hipótesis de un 'ajuste de cuentas' entre Freddy Orellana y desconocidos, los que habrían cometido el brutal asesinato la semana pasada. En tanto, se abren otras interrogantes ante este hecho.
En este último sentido, las preguntas están enfocadas en si Orellana Pérez habría sido ultimado previo a la incineración o bien se trató de ambas situaciones en un acto de terrible tortura sufrida por la víctima de este puzzle policial.
Otra interrogante plantea el hecho de si este ajuste de cuentas habría sido por temas relacionados al tráfico de drogas o bien a alguno de los códigos con que se manejan en el mundo del hampa loína, la cual habría llegado al nivel de cobrar su vida.
Un antecedente que también vuelve a ser parte de este caso guarda relación con la 'balacera' que desconocidos realizaron a una vivienda ubicada en la calle España de la población Independencia el pasado 19 de junio, pues se presume que ese habría sido un intento por terminar con la vida de Freddy Orellana.
Hecho que también podría estar dentro de las indagaciones que la Fiscalía y las policías están investigando.
Avance
Un paso importante para conocer la cadena de sucesos que le ocurrieron a este hombre es el informe de la autopsia, examen que en las próximas horas podría ser entregado por las autoridades, aportando más antecedentes, información y datos claves de este caso, que ha marcado no sólo el trabajo de los funcionarios de justicia sino también a la ciudadanía.
En este contexto, podría ser tanto el Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar), el Servicio Médico Legal (SML) o la Fiscalía de Calama los que podrían confirmar esta información y ahondar en más detalles.
El hecho de identificar el cuerpo y de esclarecer cada uno de los actos cometidos contra Freddy Orellana Pérez es sólo la parte inicial de este caso, pues la Fiscalía y la policía deberán abocarse en la búsqueda de él o los responsables, trabajo que sin duda será seguido de cerca por la comunidad loína, que en distintas plataformas sociales ha demostrado su preocupación respecto al final que tendrá este homicidio.
Un caso inédito en Calama
El caso de Freddy Orellana Pérez es único en la ciudad. Este tendría un primer antecedente la noche del 19 de junio cuando desconocidos intentaron asesinar al joven de 39 años. El pasado sábado 25 su cuerpo fue encontrado por personas al interior de una cueva de Ojo de Opache parcialmente calcinado, y tras cinco días de pesquisas y pericias científicas las autoridades dieron a conocer su identidad. Su caso no tienen parangón en las historias y hechos que han remecido a los habitantes de la provincia de El Loa.