Explotación sexual infantil: 48 casos en un año en región
AYUDA. Fundación Tierra Esperanza atiende a menores en proceso de reparación por graves vulneraciones.
La explotación infantil no es una situación invisible para Antofagasta. En 2015, en la región se trabajó con 48 casos de explotación sexual. El 86% de ellos correspondió a mujeres, mientras que un 14% a hombres.
Así fue informado por el Servicio Nacional de Menores (Sename), desde donde aseguraron que a nivel nacional los casos se elevan a 499. Los afectados se atienden en 17 proyectos especializados desplegados en el país.
La directora (s) del Sename, Ingrid Arancibia, explicó que la explotación sexual infantil es una violación severa de los derechos humanos de niños, niñas y adolescentes, pues constituye una forma de explotación económica asimilable a la esclavitud y al trabajo forzoso, con graves consecuencias para las víctimas.
"Es una de las peores formas en la que puede ser vulnerado un menor. Sabemos que existe una cifra negra en la que muchos de ellos no son denunciados y no asisten a los programas reparatorios que corresponde. Sin embargo, el trabajo colaborativo realizado junto a PDI, Carabineros y las instituciones colaboradoras que trabajan en esta temática, nos permitió intervenir a más de 50 niños, niñas y adolescentes que estaban siendo abusados de esta forma", puntualizó.
Maltrato
Fundación Tierra Esperanza, trabaja con gran parte de los niños que viven este tipo de situaciones y actualmente atiende a 65 menores que han sufrido esta vulneración de sus derechos. El 41% de la población atendida ha presentado situaciones de violencia intrafamiliar a través de maltrato físico, y un 36% negligencia parental y un 45% está en situación de pobreza. La mayoría de los casos, se da por las derivaciones de Tribunales de Familia.
Ivannia Gálvez, sicóloga, directora de Proyecto Puerto Esperanza de Antofagasta perteneciente a la fundación, sostuvo que en la región hay una multicausalidad que conjuga factores económicos, culturales, sicológicos, sociales, familiares y afectivos.
Entre algunas de las causas se mencionan: patrones de comportamientos socialmente tolerados como la adultización y parentalización de los niños niñas y adolescentes, estrategias de sobrevivencia de las víctimas y sus familias, incompetencias parentales, déficit en el ámbito educacional o deserción escolar, entre otras características.
Internet
También aseguró que esta vulneración de derechos no escatima en nacionalidades, aunque gran parte de los casos de la región corresponden a niños chilenos. "Es una realidad transversal. Debemos entender que la explotación no discrimina nacionalidades, es una realidad mundial, debemos ver que son niños sin hacer distinción de su nacionalidad", comentó.
Ivannia Gálvez advirtió que internet es un arma muy utilizada por los explotadores. Por lo mismo, para evitar cualquier tipo de situación, el control parental es fundamental para prevenir el grooming (adulto que busca amistad en menores para luego abusar sexualmente) y el sexting (envío de mensajes, fotos o videos de contenido sexual). La sicóloga sostuvo que hoy en día se ocupa la tecnología como medio de seducción en línea. "Reiteramos la importancia de estar atentos. Hemos capacitado a estudiantes, y profesionales que trabajan en infancia. Es un trabajo en red que nos debe movilizar como sociedad y decir que aquí no hay excusas, se debe denunciar y no silenciar", señaló.
Programas
Existen 17 programas especializados para atender a niños, niñas y adolescentes víctimas de explotación sexual, en 11 regiones del país. Éstos son ejecutados por ONGs, financiados a través de adjudicación de concursos públicos y supervisados técnica y financieramente por el Sename.
La directora (s) del Sename explicó que las terapias de reparación para las víctimas son fundamentales para que los afectados comprendan y superen lo vivido. Este proceso -agregó- puede durar entre 1 año y medio y 3 años, dependiendo de cada caso.
"Estos programas especializados del Sename, además del apoyo legal, incluyen intervenciones psicológicas y sociales que abarcan ámbitos de salud, educación y capacitación laboral. En el tratamiento se contempla la atención de la víctima y de su grupo familiar", comentó.
2003 fue el año del último estudio nacional que registró las cifras de menores explotados sexualmente.
65 niños de Antofagasta son atendidos en los programas de explotación infantil en la Fundación Tierra Esperanza.