"Bulls y una temporada olvidable"
Comentarista deportivo
El 27 de octubre comenzaba la temporada 2015-2016 de la NBA con el partido entre los Chicago Bulls y los Cleveland Cavaliers que finalizó con la victoria para los de Illinois.
Con Barack Obama en las tribunas, reconocido hincha de los "Toros", el cuadro en donde alguna vez brillara Michael Jordan iniciaba el camino del baloncesto norteamericano con la ilusión del alcanzar como mínimo las finales de conferencia.
El rival no era menor, último subcampeón del torneo y con LeBron James entre sus grandes figuras, lo que dio mayor realce a la victoria por 97 a 95. Mucho se esperaba de este equipo, pero hoy la situación es completamente distinta, luchando por entrar en los playoffs y con un incierto futuro de sus máximas figuras que quieren dejar la franquicia.
Los objetivos eran grandes, más aún con un plantel que cuenta con Pau Gasol, Derrick Rose o Jimmy Buttler, sumados a Nikola Mirotic y Joakim Noah en la zona defensiva. Un equipo de lujo que podría estar tranquilamente en las últimas instancias. A esto se agrega la llegada de Fred Hoiberg a la banca técnica, dando un giro radical en el sistema de juego, privilegiando lo ofensivo.
Pero a mitad de temporada todo se transformó en una pesadilla para los Bulls con las constantes lesiones de Rose, un Buttler que estuvo casi un mes fuera de las canchas, sin considerar la "despedida" de Noah tempranamente por un problema del hombro que lo dejó fuera por lo que resta de campeonato. Chicago era un verdadero hospital.
Pero la crítica más fuerte van en dirección de la franquicia que cambió el trabajo de años realizado por Tom Thibodeau, cesado entrenador de los Chicago, para dar paso a un poco experimentado Hoiberg, situación que sintieron los jugadores en el parket del United Center.
Hoy por hoy, los Bulls son un equipo de estrellas luchando por no quedar fuera de los playoffs, pero por sobre todo, por no ser la gran vergüenza de la temporada.
Cristian
Morales