Hasta que se jugó, aunque no había que cantar victoria hasta que se terminara.

Finalmente y después de más de un mes, Wanderers y Colo Colo pudieron enfrentarse en el duelo que estaba fijado para la última fecha del Apertura pasado y que se suspendió por incidentes antes de iniciarse el partido el 6 de diciembre.

Y el descanso para este polémico partido le hizo bien a los caturros que se quedaron con el triunfo 2-1 en el Elías Figueroa de Valparaíso, donde el encuentro se jugó después de dar vueltas por todo Chile como opción de escenario.

El Decano -ya sin su DT de ese momento, Emiliano Astorga y tampoco con Jorge Ormeño- se quedó con tres puntos que le pueden ser vitales en la lucha para escapar de un posible descenso, además del debut con una victoria el nuevo entrenador, Alfredo Arias.

Pero fue el Cacique el que golpeó primero. A los 18' Esteban Paredes recibe un magistral pase de Gonzalo Fierro y define con clase ante la salida del portero Mauricio Viana.

El tanto hizo despertar al local. A los 26', Álvaro Ramos recibió una armada jugada y solo en el área puso el balón lejos del portero Justo Villar.

Luego, el propio Ramos a los 41 colocó el 2-1 final. En el segundo tiempo poco hubo de trabajo para ambos porteros y más se trató la pelota en mediocampo, donde los dos elencos mostraron problemas en el manejo, evidenciando el poco fútbol antes de iniciar el Clausura.

Con esto, Colo Colo se coronó campeón -aunque aún sin recibir la copa- con 33 puntos, sólo uno más que Universidad Católica que fue sublíder y que perdió la opción de campeonar en su derrota de la última fecha ante Audax. Wanderers, en tanto, llegó a las 20 unidades.

Así, sin público y poco fútbol se pudo jugar el dilatado duelo entre Wanderers y Colo Colo, válido por el Torneo de Apertura y a cuatro días que se inicie el Clausura.

Este sábado comienza el Torneo de Clausura, uno que para Cobreloa significa mucho porque se juega la única opción posible para ascender, ya sea ganando la tabla acumulada o clasificando a liguilla para quedarse con el clausura y obtener medio cupo a la Primera "A".

Por eso, la llegada de los tres refuerzos y el buen nivel del equipo en los amistosos ante Deportes Iquique y Deportes Antofagasta le provocan un dulce dolor de cabeza al entrenador minero, César Vigevani: definir quiénes serán los elegidos para el debut y para conformar la base del plantel para este semestre.

En esa tarea, el entrenador minero parece tener claro algunos puestos como el arco, donde Jorge De Olivera es indiscutido y porta la jineta de capitán. En la zaga, el que parece haber sacado ventajas es Enzo Guerrero ya que el mismo entrenador asegura que "nos da una solidez y es un lugar que él se ganó con su regularidad. Es cierto que llegó como opción de lateral y no descartamos que en alguna emergencia podamos echar mano a Enzo pero por ahora es inamovible en la zaga, no se va a mover de ahí", recalcando el excelente nivel de uno de los jugadores más rescatables del semestre pasado.

Y considerando que la banda izquierda tiene a Boris Sandoval como insistituible, los puestos que se disputan son el de último hombre -Walter Gómez parece sacarle ventaja a un recuperado Eric Ahumada- y el de lateral derecho, donde Nahuel Pansardi se impondría a Paulo Olivares.

Respecto de este dilema, el entrenador minero afirma que "pudimos verlos a los dos y nos van a entregar variantes distintas porque dependiendo del rival utilizaremos a uno u otro porque nos aportan características distintas en la marca y la proyección",

Ya en la zona media, Carlos Gómez no tiene rival a la hora de encontrar al "recuperador" mientras que su acompañante debería ser José Barrera, aunque en algún momento incluso puede bajar Nahuel Fioretto a esa plaza dejando más arriba a Carlos Santibáñez o Iván Ledezma. Fernando Cornejo también probó la función estas semanas.

Finalmente, en ofensiva pareciera que la balanza se inclina por el tridente de José Luis Jiménez, Manuel Simpertegui y Leonel Altobelli, aunque estos dos últimos tendrán que pelear el puesto con el ecuatoriano Henry Patta y el goleador Nino Rojas. VIgevani reconoce que "la pelea en estos puestos es dura y eso nos sirve. Lo del centrodelantero es bueno porque los dos jugadores anotaron en los amistosos y están conconfianza. Y acá lo que sirve es que el grupo parta con esa confianza y motivación que nos permita encarar cada partido como final. No nos podemos relajar".

Y agrega que "tenemos jugadores que juegan en dos o tres posiciones, así que en este semestre vamos a poder manejar más alternativas. Lo bueno es que se creo competencia y eso sin duda nos va a hacer crecer en lo colectivo.

Confianza

José Luis Jiménez es uno de los que fue factor en el primer semestre durante algunos partidos pero no por ello siente que tiene su lugar asegurado en el equipo.

"Ya se vio con Antofagasta que Simpertegui apoyó mucho por su banda y generó ocasiones. El ecuatoriano (Patta) viene motivado y de seguro también va a querer su lugar. Los que llegaron están mostrando lo suyo y nos sirve. No hay relajo".

"Guachupé" sabe que ahora, el protagonismo podría repartirse más en la cancha. "Yo siempre quiero ser el mejor en mi puesto y trabajo para eso. Pero si hay compañeros que nos van a dar variantes dentro del campo es positivo, más cuando sabemos que vamos a enfrentar partidos que serán muy apretados", dijo.

5 goles anotó Cobreloa en los partidos amistosos de la semana pasada y todos fueron de su línea más ofensiva del equipo.

2-1 a favor fue el resultado del choque con Curicó Unido en el Apertura, con tantos de Jorge Piris y Enzo Guerrero.

El sistema que el entrenador minero sigue utilizando es el de 4-2-3-1 al igual que en el torneo anterior.

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