Autonomía institucional
Con el fin de entender el papel que la Educación Superior desempeña dentro del sistema de ciencia e innovación de un país, el primer paso es aproximarse a dicho sistema. Contextualicemos entonces el entorno en el que nuestras Instituciones desenvuelven sus actividades de investigación y desarrollo (I+D).
Con la finalidad de conocer la dimensión en este marco, es fundamental analizar los recursos. En relación a los financieros, Chile en el año 2012 invirtió un 0,39% del PIB en I+D, cifra que se aleja de la inversión realizada de los países que conforman la OECD (Org. para la Cooperación y Desarrollo Econ.), que destinan en promedio el 2,4% de su PIB (Conycit 2014).
En relación a la cantidad de investigadores, en el año 2010 se traduce en 1,2 por cada 1.000 habitantes económicamente activos en Chile, esta cifra en países con densidades equivalentes de desarrollo intermedio, es de 2 (Informe RedEmprendia 2015).
El sector universidades se convierte en el pilar fundamental del sistema de ciencias e innovación en Chile, puesto que ejecutan más del 38% del gasto en investigación y desarrollo (I+D), y agrupan en las Universidades del Consejo de Rectores (CRUCH) el mayor número de doctorados a tiempo completo, con el 80% (Chile y sus Universidades, CRUCH 2014).
Chile en el ranking mundial de producción científica se posiciona en el lugar 46, paralelamente, el país mantiene la cuarta posición en América Latina, aportando a la producción científica con el 8,5%, con publicaciones de 8.671 documentos y 336 solicitudes de patentes nacionales. (Conicyt 2014).
Los gobiernos chilenos, conscientes de nuestra incipiente situación, han impulsado la valorización del conocimiento, creando en el año 2005 el Consejo de Innovación para el Desarrollo, estableciendo nuevos fondos para la investigación y aumentando los recursos.
El futuro se visualiza con un arduo trabajo a realizar, nuestra situación es desafiante al momento de compararnos con otros países, y debemos considerar que nuestra cultura innovadora es reciente, pero inminente en un nuevo marco caracterizado por los desafíos globalizados.
Luis Medina Caamaño
Director de Investigación
Universidad de Antofagasta