Hasta la corona del "Rey Arturo" se vende en el comercio ambulante
copa américa. Vuvuzelas de todos los países, gorros con entretenidos diseños, bufandas, lentes y pelucas son solo algunos de los productos que se comercializan en las calles de Antofagasta.
Diez mil pesos (adultos) y 7 mil pesos (niños) cuestan las camisetas no originales de la Selección Chilena en el comercio ambulante de Antofagasta, sus ventas se dispararon en un 200 por ciento con la clasificación de la "Roja" a los cuartos de final de la Copa América y son una buena alternativa a la original que tiene un valor de $39.990 en el comercio establecido.
Pero no solo se comercializan poleras, la fiebre de Copa América incentivó la creatividad de los vendedores ambulantes quienes tienen de todo para teñir el país con los colores patrios.
Vuvuzelas de todos los países a 500 y 1.000 pesos (dependiendo del tamaño), lentes, pelucas y cintillos a $1.000, bufandas a 2 mil, banderas entre los mil y 3 mil pesos y gorros cuyos precios fluctúan entre los 500 y 5 mil pesos, en cuyos diseños encontramos la corona del "Rey Arturo", vasos shoperos, entre otros, son algunos de los productos que se ofrecen en la calle.
Tiendas como "Eduss" y el comercio en las principales arterias del centro de la ciudad, (Maipú, Prat y Matta) agotan rápidamente sus productos, ya que aseguran sin dudas que "nadie quiere ver el partido sin algún símbolo de la Roja que este año será campeón".
Alexis y Valdivia
Pero es el número "7" de la Selección Chilena, Alexis Sánchez quien se robó el corazón de los hinchas y por eso es la camiseta con este número la que más se vende, seguida del número "10" que utiliza el "Mago" Valdivia.
Para el vendedor ambulante Juan Carlos Cea, "la gente siempre se muestra entusiasta cuando juega la selección, en el Mundial también hubo mucha demanda de productos de la 'Roja', ojalá este año salga campeón y en un futuro nos visiten porque hace rato no vienen".
Cerca de las 10 de la mañana los comerciantes de la calle comienzan a instalarse en las principales arterias del centro y al igual que el comercio establecido, sus productos llaman la atención y llevan a los hogares antofagastinos la alegría de los colores que representan al país y que tienen a todos ilusionados con levantar por primera vez la Copa América.